Pues es una faena "extraña" el que teniendo informáticos (ya que pluralizas, supongo que la empresa no será pequeña) y no se quieran encargar de una conexión de redes, que aunque tú la veas compleja, quizás para ellos sea trivial.
El cuello de botella es la velocidad de subida. De poco vale que un ADSL de "Hasta 20 Mbps" sea capaz de descargar datos a 8800 kbps, si tú solo puedes enviar datos a 680 kbps. En función de esa velocidad se calibra la de calidad de compresión de audio y vídeo.
Pero antes de poder calibrar calidades, hay que "llegar" al extremo opuesto. Si las IPs son fijas, ya tienes la mitad hecha. Aparte de la dirección IP también se necesita saber el puerto de acceso, y que en ese puerto remoto haya algo escuchando.
El sistema de videoconferencia puede estar conectado directamente a Internet, pero hoy en día para evitar intrusiones y ataques de denegación de servicio, lo lógico es que haya routers delante con al menos un cortafuego básico que impida accesos no autorizados.
Si antes funcionaba todo, y de repente ha dejado de funcionar, es que se ha desconfigurado algo: el sistema de videoconferencia no se pone a la escucha, o se pone en un puerto diferente, o el router no es capaz de redirigir la conexión si se ha cambiado la IP interna de algún equipo ... eso no te lo va a decir el técnico de Telefónica, es cuestión de vuestros informáticos.
El ADSL de 20 Mbps de Telefónica es muy caro. Jazztel ofrece un ADSL residencial con 850-1000 kbps de subida por 50 euros (2 sedes serían 100 euros) y tiene servicio a empresas, pero obviamente con otro tipo de asistencia y precios de centenares de euros.
