La respuesta parece ser afirmativa si uno presta atención a lo que ha ocurrido en Chattanooga, en Estados Unidos: el alcalde de esta ciudad, Andy Berke, atribuye el resurgimiento de la economía y la calidad de vida en esta ciudad a la puesta en marcha de una red de fibra de 10 Gbps.
Berke explicaba cómo en tres años la tasa de desempleo ha bajado del 7,8 al 4,1% -envidiable- y los sueldos han ido en aumento: la red de fibra ultrarrápida ha atraído inversión y nueva industria, con presencia de factorías como la de Volkswagen y una serie de empresas de nuevas tecnologías.
La banda ancha como reactivadora de la economía y la sociedad
En nuestro país no hay iniciativas de esas dimensiones, pero varios ayuntamientos y localidades se han esforzado por tener implantaciones de fibra municipales. Uno de los casos más conocidos es el de Centelles, una pequeña población que gestiona su propia red de fibra óptica, pero también hay casos más recientes como el de Mijas, que pronto tendrá una red que alcanzará a todos los hogares de esta localidad con casi 80.000 habitantes.
Fuente: xataka.com/servicios/puede-una-red-metro…r-una-ciudad