Google ha desarrollado sus propia tecnología de mitigación de ataques de denegación de servicio para resistir el tráfico malicioso que busca saturar los servidores para dejarlos inaccesibles.
Ahora la ofrece de forma gratuita para respaldar a otros sitios que sean objetivo de este tipo de ataques por alojar contenidos relacionados con política o derechos humanos.