El pc no hiberna en debian testing lxde

¿Esto es lo único que nos queda a los usuarios de Linux?, ¿siempre pasarnos de una distro a otra cuando algo no funciona?, pues sí, es la tónica general en vez de intentar arreglar nada. Lo creamos o no, al final es lo mismo que Windows. Por supuesto no es generalizable a la todos los usuarios pero sí a la mayoría; realmente son muy pocos los que intentan investigar y corregir un bug, principalmente gente preparada que se dedica a esto de la informática -como debe de ser-.

Como usuario de Linux desde hace casi 10 años, a nivel práctico estoy cansando de ciertas cosas, da igual la distro que use -salvo una, Slackware, pero que tiene sus propias limitaciones funcionales y organizativas-. No concibo las masivas actualizaciones de seguridad semanales que requiere el sistema -¿debido a la naturaleza del modelo de desarrollo Bazar?- y que muchas veces te dejan con el culo al aire o no hacen más que consumir tu tiempo y uso de CPU, así como los continuos cierres inesperados del que se supone el escritorio más potente, KDE. No comprendo que tantas novedades reales puede traer para un usuario normal una nueva versión de tu distro cada 6 meses (Ubuntu, OpenSUSE, etc.) y que a veces el kernel no hace más que cargarse el rendimiento de máquinas con procesadores de un núcleo que aún tienen que decir (3,06Ghz con HT), o por el contrario, esa tan premiada pero falsa estabilidad de algunas distros que entregan nuevos lanzamientos cada dos años o más, pero cuyos escritorios están repletos de bichos y funcionalidades ausentes (Debian-Xfce) -y no, realmente testing nunca fue para un escritorio productivo-, o aquella otra falacia de la seguridad y soporte (el caso de los servidores mplayer, openssh...) o todavía peor, la libertad, cuando después de que todo lo demás falla, la mayor libertad a la que se agarran algunos es la de poder elegir, donde los fanáticos del software libre (Richard Stallman, GNU, usuarios bucólicos...) nunca se dan cuenta que eliminar opciones del abanico, por mucho que sean libres, no es libre elección sino coacción (Iceweasel, Skype... ¿realmente alguien usa Jabber más allá de hablar con sus coleguitas virtuales en la salas de chat?)

Cansado de todos estos politiqueos y sistemas poco profesionales y funcionales, necesito un ordenador que trabaje para mí y no al revés, así que, en mi caso, después de muchos tropiezos en la misma piedra voy a dar una oportunidad a ese desconocido BSD y, si la cosa sale mal, no tendré reparo alguno en volver con Windows porque, los virus por mucho no me dan todo el trabajo extra que me da Linux y adivina, en Windows también existen aplicaciones libres y de código abierto -que soluciona el tema de cracks-. Si en algo hay que reconocer a Linux es su corto pero enfocado posicionamiento empresarial.