Y otra más de rigor periodístico

Buster 25 octubre 2009 14:28

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Al poco de fallecer Andrés Montes F.J. Barroso escribía en El País:

"Montes pasaba por dificultades económicas muy serias, según fuentes judiciales. Tras comentar el Eurobasket, se encontraba ahora sin trabajo y deprimido. Recibió hace unos días la orden de desahucio de su vivienda, en el número 31 de la calle de Espronceda, en el distrito madrileño de Chamberí."

Fuente:

elpais.com/deportes/2009/10/17/actualida…_850215.html

Hoy publica Javier Caballero:

"María atiende negocios familiares y tiene relación con los allegados de Amancio Ortega, propietario de Inditex, el Imperio Zara. De hecho, la casa que ambos habitaban era suya. Lo que hace imposible el inminente desahucio anunciado por algunos medios."

Fuente:

elmundo.es/elmundo/2009/10/25/comunicaci…6462339.html

De ser cierto el Sr. Barroso debería dejar de trabajar como periodista por lo que le resta de vida. Si de mí dependiera mañana mismo estaba en el paro.

Menuda mierda de periodistas que tenemos en este país.

Keil 25 octubre 2009 14:40

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si roncero es periodista o pipi estrada, yo soy cirujano, arquitecto y abogado....ñapa es

Bilbokoa 25 octubre 2009 15:41

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Pero Buster... ¿ a estas alturas de la vida te sorprenden aún todas estas miserias y toda esta mierda que aparece y se publica en los periódicos?

Yo ya estoy curado de espanto... cada día todo está más emponzoñado, todo huele más a mierda.

Recuerda que vivimos en el país donde cualquiera es periodista o escritor... ¿verdad, señora Ana Rosa Quintana?

Porca miseria. :(

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Buster 25 octubre 2009 16:40

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Mala cosa es cuando nos acostumbramos a este tipo de cosas y llegamos a un punto en que nos parecen normales. A mí no me da la gana de que esto me parezca normal. No me da la gana de acostumbrarme a tanta mierda.

Asusta pensar la cantidad de artículos que se publican y que contienen mentiras, pero como nadie se encarga de desmentirlas pues quedan como verdades.

Para un periodista escribir una noticia que contiene una mentira de ese calibre es el equivalente a que un arquitecto construya un edificio y se le derrumbe o que un médico diagnostique un catarro cuando es un cáncer.

La diferencia entre los errores de los arquitectos y los médicos y la de los periodistas es que en un caso los errores pueden costar vidas humanas y en el otro no suele pasar nada, si a caso una querella por difamaciones.

No nos podemos mostrar indiferentes ante la ineptitud.

Vermu 25 octubre 2009 15:58

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Tampoco es verdad que no tuviera trabajo, el lunes iba a empezar en Marca.