Aquí se mezclan tres cosas en este hilo, y nunca suelen acabar bien. La primera es la de los fanáticos del software abierto. El software abierto está bien, pero los fanáticos radicales acaban contaminando hilos, con su idea de que el software cerrado está mal y debe ser atacado. Son como los libertarios que acaban siendo los más fascistas ultraizquierdistas.
Luego está el otro problema de que un software no está funcionando. Tampoco ha dado aquí explicaciones de por qué no está funcionando, qué tipo de errores aparecen, si el producto es adecuado para su versión de Windows (que no nos ha puesto cuál es). Francamente nunca me he encontrado con un Office que no funcione, a no ser que el sistema esté realmente hecho polvo. También es cierto, como ha apuntado el mensaje de abajo, que Office 2010 -como todo software- tendrá unos prerrequisitos que cumplir.
Aparte tenemos la cuestión de que un cliente que ha pagado un producto que no le funciona, no sabe cómo actuar. Ante el problema de la piratería de software, cualquier negocio avisa que no se devuelve nunca el importe. Supongo que si lo hacen grandes cadenas, con departamentos legales que sabrán perfectamente si la legislación les ampara, no será ilegal. Yo en mi caso ignoro qué dice sobre este tema la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios. Si la tienda le remite al fabricante, el cliente tendrá que lidiar con Microsoft, y atenerse a la larga licencia de uso.