A pesar de que el tiempo y la regulación han ido aumentando la competencia en los mercados de comunicaciones electrónicas españoles, todavía persisten en ellos barreras a la entrada y otros problemas de competencia que la regulación aborda de forma proporcionada y acorde con la normativa comunitaria. El marco regulador de la Unión Europea (UE) condiciona la imposición de obligaciones regulatorias específicas a la determinación de la existencia de operadores con poder significativo de mercado y a la identificación de problemas competitivos sistemáticos en los mismos
La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) acaba de publicar la Memoria anual de actividades 2012, una de las obligaciones de control y transparencia que tienen los organismos públicos de regulación tras la aprobación de la LES (Ley de Economía Sostenible, 2011).
En ella pone de manifiesto que aún existen problemas de competencia y que su existencia es necesaria: "lo más efectivo es primar el establecimiento de obligaciones en los mercados al por mayor para facilitar así el establecimiento de operadores alternativos, lo que debería resultar en una mayor competencia en los mercados minoristas"
En este documento se recogen las principales actuaciones de esta institución durante el año pasado.