Al margen de los beneficios obtenidos por Euskaltel este año, creo que la declaración del 2006 como "el año del cliente" fue más una declaración de intenciones frustrada que otra cosa.
Entre las grandes cagadas de este año podemos contar con la TV Mini, que no tuvo la aceptación que ellos hubieran querido, sumado a la petición de cobro de las cadenas involucradas a las operadoras que se beneficien de este tinglado, que puede haberles frenado.
Por otro lado, el cambio de tv digital al sistema VOD del que tanto se habló en estos foros hubiera sido una bomba para Euskaltel (al nivel de Imagenio) si el contenido de su TV fuese mínimamente decente. Finalmente, tampoco se ha materializado. Quizá se han percatado de que sus clientes no contratan su TV ni siquiera realizando movimientos tan rastreros como sustituir canales en la tv analógica (el difunto "C:" , "40TV") por canales del estilo "ehs" y canales locales que no valen ni el precio que cobra la emisión de la pitonisa de turno. En este mismo tema, entra otro movimiento que, creo, tampoco tenían planeado como la eliminación de determinados canales en su TV digital por motivos económicos (léase rastreros) que merman aún más la calidad de este subproducto.
Y cómo no, la telefonía móvil. Este año iba a ser el año de la renovación con Amena/Orange. Tras 6 meses de negociaciones se rompe el acuerdo y negocian a la carrera (en julio) un contrato con Vodaphone. Euskaltel pierde estatus relegándose a mero revendedor (que ya lo era) de telefonía móvil y se ve envuelto en una campaña de migración que le cuesta sus cuartos.
Y es que, estos movimientos y sus inversiones en fibra óptica realizados años atrás son una losa que resultan en unas ofertas desfasadas en cuanto a precio, servicios poco atractivos y una política de captación de clientes propia de mercadillo en el que el cliente fijo es relegado a mero proveedor de fondos.
El balance de cara a la empresa es positivo, si bien hay que preguntarse si el motivo es el aumento abusivo de sus cuotas realizadas en enero (7%) y a la captación de nuevos clientes y retención de bajas a base de regateo.
Pero el balance de cara al cliente es claramente negativo ya que la sensación general es que se está pagando más por menos y eso repercutirá en el futuro de la empresa.
Euskaltel deberá cambiar porque en estos temas "Cliente que pierdes, cliente que no recuperas".