El ministro de Educación, Cultura y Deporte José Ignacio Wert se ha reunido esta semana con las entidades de gestión de derechos de autor para explicarles que el nuevo canon digital es un sistema transitorio hasta que la Comisión Europea se pronuncie sobre un modelo común de compensación por copia privada en toda Europa. Éste consiste como es sabido, grosso modo, en que los dispositivos electrónicos ya no soportan cargas para el que los compre y lo que se deja de cobrar por esas copias privadas se remunerará "a ejercicio vencido" mediante una partida fijada en los Presupuestos Generales del Estado.
Las entidades de gestión se quejan de que ingresan menos mientras que el Gobierno pretende impulsar una reforma normativa que refuerce la defensa de los derechos de propiedad intelectual y mejore la eficacia de la Comisión Sinde. No parece casualidad que el embajador en España de EEUU, Alan D. Solomont, haya afirmado que no hemos podido "ponerle coto a la piratería".
Una de las primeras medidas aprobadas por el actual gobierno de España fue suprimir el canon digital, por el cual las entidades de gestión de derechos de autor recaudaban una serie de cantidades por los aparatos tecnológicos que compraban los ciudadanos.
Las ocho entidades con las que se ha reunido el ministro son: la SGAE, AGEDI (Asociación de Gestión de Derechos Intelectuales), AIE (Artistas, Intérpretes o Ejecutantes), AISG (Artistas Intérpretes Sociedad de Gestión), CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos), DAMA (Derechos de Autor de Medios Audiovisuales Entidad de Gestión), EGEDA (Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales) y VEGAP (Visual, Entidad de Gestión de Artistas Plásticos).