Yoigo se decanta por Zegona al subir su oferta con un mega cheque del SantanderTeliaSonera, el dueño del operador español, elige la propuesta del fondo inglés frente a la de MasMósvil al ofrecer hasta 600 millones gracias un préstamo sindicado de última hora
La venta de Yoigo entra en su recta final. Y el candidato mejor colocado esZegona, el fondo británico dueño de Telecable. Según distintas fuentes, la compañía inglesa ha elevado su oferta por el operador de telecomunicaciones español de TeliaSonera tras recibir un préstamo de 715 millones del Banco Santander. Un dinero con el que financiaría esta operación y acometería una reestructuración total de la deuda del grupo resultante de la posterior fusión.
Otras fuentes corroboran el incremento de la propuesta por parte de Zegona, que ahora ofrece algo más de 500 millones y asume los 100 millones de pasivo de Yoigo. En total, pone encima de la mesa una cifra que supera ligeramente los 600 millones y que supera los 525 que estaba dispuesto a abonar MasMóvil. Aunque la compañía dirigida por Meinrad Spenger había hecho un esfuerzo ímprobo por quedarse con la operadora controlada por la multinacional escandinava (75% del capital), al presentar una oferta menos apalancada -con más capital y menos deuda-, lo cierto es que TeliaSonera prefiere el cheque del fondo inglés.
Zegona ha podido elevar su oferta gracias a que Banco Santander le ha concedido un crédito de 715 millones, repartido en tres tramos. El primero de 75 millones, el segundo, de 275 millones y el tercero y último, de 365 millones. Según las mismas fuentes, en el préstamo sindicado también participan BNP Paribas, BBVA y Banco Sabadell. Con este dinero, la compañía podrá afrontar una posterior reestructuración de la deuda resultante de la integración de Yoigo y Telecable.
El principio de acuerdo cuenta con el visto bueno de ACS, el segundo mayor accionista de la operadora de móviles, con el 17% del capital, que no va a vender su participación. Al contrario, Zegona le ha ofrecido quedarse en el accionariado, pero del grupo fusionado, de tal forma que la constructora deFlorentino Pérez evite tener que hacer una provisión por su paquete. Al tener su paquete tasado en 221 millones, con la oferta de la compañía británica hubiera tenido que realizar un deterioro de cerca de 100 millones, casi un 14% de los beneficios obtenidos en 2015.
Con esta fórmula, ACS podrá defender ante Deloitte, el auditor del grupo, que su nueva participación en la compañía fusionada tiene una capacidad de generación de caja y un potencial valor que le evite apuntarse una provisión que le dificulte aún más conseguir el objetivo de alcanzar un beneficio de 1.000 millones, como ha prometido publicamente Florentino Pérez.
Por su parte, FCC, la constructora en manos de Carlos Slim, dueña del 3,44% de Yoigo, sí tiene provisionada la pérdida, ya que su paquete lo tiene contabilizado en libros en 11,2 millones, por lo que la totalidad de la compañía valdría 329 millones. En consecuencia, si vende, podrá incluso apuntarse ligeras ganancias, muy lejos, eso sí, muy lejos de los entre 3.500 y 5.000 millones en los que se tasó la operadora cuando se creó en el 2000.
Yoigo contaba, a finales de 2015, con 3,3 millones de clientes y una facturación de 854 millones de euros, un 5% más que en el ejercicio anterior. El margen bruto de explotación (ebitda), de 77 millones de euros, creció un 12%, mientras que, por primera vez desde su nacimiento en 2006, logró unresultado neto positivo de dos millones de euros. Por su parte, Telecable, con sede en Oviedo, es proveedor de televisión, telefonía fija y móvil, banda ancha y soluciones empresariales avanzadas para la comunidad autónoma de Asturias. Cuenta con más de 162.000 clientes residenciales y corporativos, y en 2014 obtuvo unos ingresos de 131 millones de euros y un Ebitda de 63 millones de euros.
La semana pasada, MasMóvil cerró la compra de Pepephone por 158 millones, una operación con la que quería ganar músculo para una posterior integración con Yoigo. Un paso que ahora tendrá que esparar una nueva oportunidad cuando se produzca la siguiente ronda de consolidación del sector.