Movistar y Orange España han incrementado los salarios de la mayoría de sus empleados conforme al IPC. Al igual que, en parte, muchas de sus tarifas.
Por el contrario, Vodafone, que ha indexado milimétricamente con el IPC todas sus tarifas de contrato, ha optado por subir tres veces menos que los precios (un 2,5%) los salarios de sus empleados.
La compañía ha reducido ingresos, como no podía ser de otra manera con las tarifas tan poco competitivas. Prácticamente no tiene OMV usando su red, al contrario que las otras, que además está bastante saturada en muchas zonas de España (caso de Madrid capital, donde en 4G difícilmente alcanza los 20 megas). Por si fuera poco, un vistazo en antenasmoviles.es revela que es la más rezagada desplegando el 5G, tanto en total como en la última semana.
Malos agüeros.