Según el diario francés Le Figaro, las instalaciones de Telefónica recibieron por sorpresa ayer la visita de los inspectores de la Comunidad Europea, tras la sospecha de que la operadora pueda estar realizando prácticas contrarías a la libre competencia a la hora de intercambiar tráfico con los proveedores de contenidos.
Aunque no se han revelado más detalles, la intervención podría estar buscando practicas irregulares a la hora de intercambiar tráfico con grandes proveedores como Youtube de Google, como podría ser la ralentización del tráfico. Las operadoras han reclamado reiteradamente a Google que pague por el tráfico que genera en sus clientes.
Las inspecciones también han afectado a otras dos grandes operadoras europeas: Orange y Deutsche Telekom.