Los fabricantes de televisores siempre estarán por detrás en cuanto a su capacidad de integrar reproductores multimedia: no es su negocio. Yo he visto en los Samsung SmartTV que cada dos por tres meten aplicaciones nuevas, pero para acceder a servicios de Internet con los que llegarán a acuerdos comerciales.
No se van a mojar especialmente el culo para que a ti te funcione mejor un nuevo formato de vídeo, sobre todo porque podría haber actualizaciones de firmware para interpretar un contenedor nuevo (si es que aparece alguno) pero no van a decodificar por soft, todo lo que se decodifica se hace por hard con chipsets especializados. Y esos te aseguro que no son actualizables: decodifican lo que decodifican y punto.
Además está la industria discográfica presionando para que no sean lo suficientemente versátiles. Los televisores de hoy en día, aún pudiendo hacerlo por potencia, no reproducen ISOs (ni de DVD, ni menos de Blu-Ray) y algunos no reproducen codecs de audio como DTS, DTS-HD Master Audio, Dolby TrueHD. Para eso están los reproductores externos.
Y hasta en ellos hay movidas. Yo tengo un reproductor de 2010 que me costó 200 euros, y reproduce de todo, incluso lleva Java para reproducir los menús de las ISOs de los Blu-Rays. Ahora mismo en 2013, aunque te gastes 200 euros o más, los reproductores externos no te sacan menús en Blu-Ray desde que salió la protección Cinavia y la industria discográfica empezó a atacar a este tipo de aparatos.
Además, siempre habrá una nueva tecnología. Ya en el último CES de Las Vegas en Enero de 2013, se dijo que el 3D estaba acabado. Nadie presentó absolutamente ningún avance en ese sentido: los fabricantes de televisores se centraron exclusivamente en las pantallas OLED curvas de más de 55 pulgadas y con resolución 4K. Esa será la nueva moda.