Terror por teléfono.
Dimos de baja una línea fija, en otra casa, que llevaba dos meses sin funcionar más de dos horas al día. Reclamaron una deuda, excesiva (más de 50 euros), por quince días transcurridos antes de darlo de baja, y a pesar de todo la pagamos para no sufrir mayores perjuicios (tengo el recibo de ingreso delante). Un año después de la baja y tres meses después de pagar lo que reclamaron, llaman ¡a las 11 de la noche! preguntando: "¿Es usted familiar de…?" Casi un ataque al corazón. "…que si no paga esta deuda (ahora se han inventado otra) el jueves (dentro de tres días) pondremos a … en la lista de morosos". Supongo que aprovechan la campaña de la DGT (para los que no están en España, anuncios en los que ves a una madre o un hijo recibiendo la noticia de un mortal accidente de tráfico) para provocar aún más terror. Es como si te sacan una navaja. Nuestro error fue darles la cartera la primera vez. La voz sonaba colombiana, me pregunté si luego nos mandarían un sicario.
