Telefónica está promoviendo entre sus empleados una campaña voluntaria con la que busca implicarlos en la atención al cliente.
Durante unas semanas, grupos de 10 empleados llamarán de forma personal a algunos clientes de Movistar seleccionados entre los que aún no tienen todos los servicios fijo y móvil en Movistar, para tratar de convencerles de la conveniencia de pasar a tarifas fusionadas.