La Audiencia de Cantabria ha declarado ilegal la forma en la que Telefónica empezó a cobrar 0,58 € al mes por el servicio de identificación de llamadas a partir de julio de 2008, servicio que había sido gratuito desde el año 2001.
A partir del verano de 2008 Telefónica empezó a cobrar por el sin preguntar, por lo que para el tribunal se trata la "imposición de un servicio oneroso no contratado", para el que debería haber requerido expresamente a cada cliente si deseaba contratarlo.