Estos se pensaban, después de las elecciones, que todo iba a ser igual que siempre, que sería igual que cuando no tenían la mayoría absoluta, y bueno, en dos tardes pactaban con los tontos útiles de IU, y ya está, a seguir saqueando.
Mira tú por donde, ahora IU está en desmontaje, y ya no pinta una mierda. La 'califa' de Andalucía se pensaba que nada, que no pasa ná, que en dos tardes les decían cuatro frases 'bonitas' a los de PODEMOS y CIUDADANOS, y que se los camelaban la mar de bien, presidencia obtenida, y otros 4 años más de régimen.
Pero resulta que no, que con todos los defectos que tengan, los nuevos partidos exigen compromisos reales, concretos. Y claro, de eso, en el PSOE-A no hay.
Y la señora ahora está enfadada, porque no la votan (es como si pensara que tenían que votarla por obligación) y anda echando pestes y culebras sobre los dos nuevos partidos que, en ningún caso, van a pasar por el aro del régimen socialista.
¿De qué se reían en el PSOE la noche electoral? Porque no tenían ningún motivo para reirse. Andalucía es el único feudo (nunca mejor dicho) que les queda. El partido está desaparecido en el resto de España, pero andaban muy contentos la noche electoral... pensaban que todo seguiría igual.
Pero las cosas han cambiado, van a cambiar. También en Andalucía, que ya es decir.
Ahora, siga usted pataleando, señora Díaz, que da usted vergüenza ajena. Ah, por cierto, lo de Aznalcóllar, tela, y en su mandato. A ver, cómo lo explica.
Siga pataleando porque no la votan, da usted PENA. Se les acaba el cortijo, señora, se les acaba.