"...Pues no, aquí no me sale ..." "...Pues no, no me deja .."
Sí, lo adivinais, es el teléfono 902 del clan de los wanadoowies, el SAC, uno de los más insólitos fenómenos corporativos en el ámbito de la gestión privada de los servicios.
Estas dos son las dos frases más frecuentes, con mucho, que te encuentras, pronunciadas por personas, probablemente bienintencionadas, para las cuales la aplicación informática que manejan es un territorio vasto y desconocido del cual ignoran casi todo, probablemente por falta de formación. Hace que el Pc que manejan se convierta en una pantalla única e infranqueable.
No parecen saber ir mas allá del primer menú que les sale, ese que les debe aparecer cuando les das tu DNI y que seguramente solo contiene tus datos básicos, producto, dirección, etc, eso por lo que hace referencia a lo del ..no me sale.. .ahí estarán ellos y ellas, metidos en sus cubículos con sus auriculares, echando horas, que no pueden ni levantarse a mirar si les llega el fax que les pasas en ese momento (lo juro).
Lo del "no me deja" viene a cuento de que parecen condenados a las gestiones mas inocentes, ay, criaturas. La base de datos real no la toca ni Dios.
La auténtica administración se lleva en otro sitio, con lo cual de nada sirve llamar al 902, ya que les falta tiempo para derivarte al fax,o bien a que esperes al ¿ocupadísimo por escaso personal? SAT (10 días en una incidencia mía).
Yo creo que es una auténtica revolución en el ambito de la atención personal. Por primera vez se apuesta en las selecciones de personal no por los repelentes "number one" ni por los currículos avasalladores.
De eso nada, queremos gente normalita, incluso con ligeros déficit gestores, ¿porque no? al estilo de Pedro Almodovar que pone a su madre de presentadora de noticias en sus pelis, que también tiene derecho.
Que el peso de la gestión recaiga, como nunca antes, en el cliente, penalizando así la presentación de incidencias...
Todo se completa a base de darles competencias limitadísimas, que así seguro que no meten las manitas donde no interesa, bajo la presión de algún cliente persuasivo.
Las excepciones, como el amigo Kefren que entra por aquí, necesitan de estos foros donde desahogar el exceso de competencia personal que dicho ambiente prohibe.