La nueva idea de Pepephone para marcar distancias con el resto de operadoras se llama "toque de atención". Permitirá a los clientes que estén descontentos con el servicio de la operadora, imponer directamente una penalización en forma de descuento del 10% en su próxima factura, simplemente indicando una razón a través de el espacio de cliente en la web de la operadora.
Aunque la operadora no lo aclara en el email que está enviando a sus clientes, es de esperar que este mecanismo esté limitado para evitar abusos.
Al no hacer regalos, ni promociones ni ofertas, ni trucos raros, ni permanencias ni compromisos de consumo, todo, en teoría, debería ser fácil de entender y no debería haber muchos conflictos. Y todo esto es cierto y más o menos funciona, pero aún así sigue habiendo problemas que no conseguimos resolver, o que no conseguimos explicar suficientemente bien, o soluciones que no te acaban de gustar como cliente. Y en este caso te sientes impotente porque ya no hay un siguiente paso que te permita vengarte de nosotros cuando sigues enfadado. Algo así como poder pinchar una aguja en un muñeco de vudú con la forma de Pepe. Por eso, aprovechado que somos una empresa de móvil (bueno, ahora también de ADSL) hemos decidido lanzar un nuevo tipo de llamada: La llamada de atención.
La llamada de atención consiste en que, cada vez que entiendas que no estás satisfecho con la manera en la que te hemos tratado o solucionado un problema, independientemente de la indemnización que te corresponda o del resultado de tu reclamación o gestión, podrás castigarnos imponiéndonos una penalización del 10% de tu factura. Para hacerlo basta con que accedas en la web a tu área Mi Pepephone y, en el apartado "atención al cliente", selecciones hacernos una "llamada de atención". Sólo te pediremos que haya un motivo y que nos los digas para intentar entenderlo, pero no nos defenderemos. Lo aceptaremos y te aplicaremos el descuento en tu siguiente factura e intentaremos comprender qué ha pasado para evitar que pase otra vez, aunque pensemos que no tienes razón.
Te aseguramos que ninguna empresa quiere recibir llamadas de atención de sus clientes y, aunque esto parezca una chorrada, no lo es. Si recibimos muchas es que algo no va bien y no se reflejará sólo en nuestra sensibilidad, sino también en nuestro bolsillo. Algo que a las empresas les duele. Como te dijimos en un rollo-mail de hace tiempo, si en un problema sólo pierde el cliente, este nunca sabrá si a la empresa le da igual o no. Aquí perdemos los dos.