Ya sabía yo que Jesusito Arriba Franco encontraría la manera de comerse a Telefónica... ahora sí que se van a cagar todos por la pata abajo...
Y para rematar, comienza el troceo de Auna:
2.600 millones de euros son casi medio billón de pesetas. Entre las dos no llegan al millón de clientes significativos-oficialmente millón y medio- (Telefónica tiene 12 millones sólo en España y en líneas fijas), y mueven estas cifras astronómicas... Si al final habrá que darle una medallita al Dopico: sólo ha sobrevivido Euskaltel y R, y ojalá Telecable. Ni que decir tiene que si las ofertas de ONO no eran para tirar petardos (cuando no peores que las de R), y las de Auna mejor ni hablar, este globo con 800.000 toneladas de lastre dudo mucho que esté en condiciones ya no de plantarle cara a Telefónica, sino de dar un servicio en condiciones y competitivo. Pues nada, hasta aquí hemos llegado, y Telefónica a seguir chupando del cable putrefacto.
La jugadita de Endesa les habrá sentado como una patada en los cojones a los de UF... como que me alegro.