Las operadoras han remitido a través de la asociación sectorial Ametic una carta dirigida tanto al Ministro de Industria como a la CNMC, en la que piden que intervenga para evitar el canon que obligará a las operadoras a pagar 2,4 € por cada línea de banda ancha que vendan.
La Generalitat ha introducido este nuevo impuesto en los Presupuestos de 2014, que se aprobarán la semana próxima en el Parlament con el fin de recaudar 18 millones de euros.