Al carajo, señoras y señores. Al quinto pino, a tomar por saco, al cuerno es donde los sabios ciudadanos catalanes terminan de mandar el ambicioso, desproporcionado e incoherente proyecto independentista del señor Arturo Más.
Este señor, Arturo Más, pretendía que hablara la voluntad de un pueblo. Y la voluntad de un pueblo ha hablado, y lo ha mandado a freír espárragos. A esparraguear. Y efectivamente, aquí vemos al señor Arturo Más recogiendo espárragos en un campo verde... ¿Pero no está en Cataluña el señor Más? Aquí vemos, de fondo, cumbres nevadas (deben ser los Alpes) y tenemos cerca un lago (¿será el lago Lemán?). Y es que puede ser que el señor Arturo Más haya ido a esas tierras helvéticas a recoger el dinero que piensa que es suyo. Y será castigado por ello con jueces y con puñetas. Efectivamente ahí es donde han mandado los ciudadanos de Cataluña al señor Más: ¡a hacer puñetas!
¿Será Arturo Más juzgado, castigado y aprisionado? Pues piensa este señor que puede recoger dinero, que puede recoger fondos ocultados en Suiza, cuando todos sabemos que cualquier dinero de cualquier español en Suiza no pertenece a otra persona o a otra entidad que no sea la Casa Real española...
Asimismo queda totalmente demostrado por voluntad de los ciudadanos que Cataluña es tan española como el oso y el madroño, ¡coño!