Si algo me gusta de Vodafone-Ono es que son muy formales, atienden las incidencias con celeridad y no cuentan historias. La cuestión llega cuando sabes que es un problema del nodo que arrastra de tiempo atrás y probablemente no se va a solucionar nunca.
Vinieron a mi casa, me mostraron una larga lista de clientes conectados al nodo con errores de conexión diarios de hasta cuatro dígitos, me cambiaron el canal del wifi (no hacerlo es como no tomarse el café del día) y se marcharon con el compromiso de dar cuenta a la central de que se trata de un problema masivo: A esperar la reparación durante una semana, supongo que el tiempo necesario para que la incidencia expire y empezar de nuevo...
Curioso que todos los días me quedo a la misma hora sin conexión.
Es una lástima.