Las principales operadoras españolas de telecomunicaciones parecen tener claro que las conexiones de fibra óptica hasta el hogar (FTTH), capaces de ofrecer velocidades de acceso a internet superiores a 100 megas, son estratégicas de cara al futuro. La apuesta inversoras así lo indica. Y es que el conjunto de las compañías tienen previsto aportar más de 2.200 millones de euros a estos proyectos.
La última compañía en moverse ha sido Jazztel. La empresa anunció este jueves un acuerdo con la china ZTE para el despliegue de su red, en un contrato con un importe cercano a 450 millones de euros, el mayor de la historia de la compañía. La intención de la operadora, que en octubre firmó un acuerdo con Telefónica para compartir infraestructuras verticales, es comenzar el despliegue cuanto antes. De hecho, las redes de nueva generación van a ser uno de los pilares fundamentales del nuevo plan estratégico que la compañía está diseñando en la actualidad.
Con este movimiento, Jazztel no quiere perder posiciones frente a Telefónica, que es la compañía que está realizando las mayores inversiones en este ámbito. La operadora que dirige en España Luis Miguel Gilpérez, prevé cerrar 2012 con una inversión en las redes de fibra hasta el hogar por encima de 300 millones de euros, tras una aportación de 256 millones durante 2011.
Telefónica, tal y como indicó el citado Gilpérez en septiembre pasado, prevé mantener este ritmo inversor hasta el año 2015, lo que implicaría una inyección próxima a 900 millones en los próximos tres ejercicios fiscales. Madrid, Barcelona y Valencia, entre otras ciudades, son los objetivos principales de la compañía, que en su conjunto busca llegar a cerca de siete millones de hogares en su expansión.
A su vez, Orange también prevé destinar en torno a 300 millones de euros, (una apuesta más modesta) en los próximos cuatro años para intentar cubrir con su red de fibra en torno a 1,5 millones de hogares. La operadora tiene en marcha este proyecto y se encuentra en la fase de selección de proveedores de equipos de red, según señalan fuentes de la compañía.
La filial española de France Telecom, indican desde la compañía, ha llevado a cabo ya diversos pilotos de fibra óptica con red propia en Madrid y Barcelona además de tener un acuerdo en este ámbito con Asturcon.
Una de las incógnitas que todavía debe resolverse es la posición que va a tomar Vodafone en este área de negocio. Recientemente, el consejero delegado de la operadora en España, Antonio Coimbra, dijo que la empresa tendrá una oferta de redes de nueva generación, si bien señaló que la empresa está evaluando todas las opciones posibles. El ejecutivo reiteró la intención de la compañía de buscar acuerdos de co-inversión en redes con otras firmas además de alianzas comerciales.
En los últimos tiempos, Vodafone ha reclamado en varias ocasiones al regulador una mejora de las condiciones de competencia, advirtiendo además que en España no serán rentables la implantación de varias redes de fibra.
Avance en las ciudades
En cualquier caso, las inversiones de las operadoras de telecomunicaciones se están centrando inicialmente en los grandes núcleos de población, según señalan fuentes del sector, que recuerdan que es una apuesta que se puede rentabilizar con mayor rapidez.
En este sentido, el banco de inversión JP_Morgan señalaba en un informe para sus clientes que el despliegue de estas redes de nueva generación se va a beneficiar de la alta concentración urbana de España así como de los acuerdos para compartir infraestructuras.
