Japón es lo más parecido a una sociedad a lo Blade Runner con toda la sofisticación y utilización de 'gadjets' o aparatos electrónicos de ultimísima generación.
La fiebre por los 'gadjets' ha llevado a muchos jóvenes a perder el interés por otros aspectos de la sociedad de consumo y en Japón parece ser que le ha tocado al automóvil, es decir, los nuevos consumidores prefieren consumir todo tipo de 'gadjets' que pensar en adquirir un automóvil.
También hay que reconocer ciertas peculiaridades de la sociedad y organización víal japonesa para darse cuenta que el automóvil pierde sentido en aquel país.
Ya hay quien considera que Japón se asoma a una sociedad "post-car" mediante un proceso de "demotorización", lo cuentan en Newsweek.
¿Llegará esto a Europa y concretamente a España?, desde luego con el barril de petroleo a 135$ o más, parece razonable prescindir de automóvil.
Saludos.