Parece que los dueños de las grandes aceituneras y cadenas de distribución (porque aquí están implicados todos) pensaban que subiendo artificialmente el litro a precio de oro (entre 7,5~8,5€ de mínimo hoy de oliva) seguiríamos pasando por el aro, al igual que lo hicimos con las subidas generalizadas por Ucrania hace 1 año. Aunque luego vieses la botellita de producto nacional en el extranjero por menos y ya empieces a sospechar.
Pues amigos, han conseguido el efecto contrario, que se coman sus botellas con papas. La gente ha pasado a no comprar mas allá de lo mínimo y se ha incentivado métodos alternativos, como la compra de una freidora de aire el que aún no tuviese una, así como freir solo con aceites mas baratas como girasol, o freír a la francesa con mantequilla.
¿Y qué responde el sector? Que piensan seguir haciendo acopio y prevaricación hasta junio 2024. Pero saben lo que dice el dicho, la avaricia rompe el saco.