Pues eso es lo que hay... o mejor dicho, lo que no hay. Aunque la crisis no ha hecho más que empezar, el gobierno de España admite que ya no tiene margen de maniobra ni recursos para hacer nada más frente a la crisis.
Simplemente se encomiendan al paso del tiempo y a que algún día la cosa mejore un poco.
Con este panorama en el que el gobierno del país admite que no tiene nada que hacer, salvo esperar a que pase el temporal (que puede durar varios años) entiendo perfectamente los pronósticos acerca de que 2009 se cerrará con más de 4 millones de parados.
La noticia la podéis leer en un diario poco sospechoso de ir contra el gobierno, como es El País, que titula la noticia como "el gobierno se queda sin recursos frente a la crisis".
Por otro lado, en Cinco Días leo que el mercado de los vehículos comerciales está absolutamente hundido y que refleja el desmoronamiento de la pequeña y mediana empresa española, que es la que principalmente usa este tipo de vehículos. El descenso de ventas en novimebre ha sido de casi un 63%, casi nada.
Esto se hunde y al menos el gobierno en esta ocasión es sincero: no hay nada que hacer, sálvese quien pueda.
Pues eso, de la España del pleno empleo a una España en 2010, que estará hundida económicamente, con inestabilidad política y mucho descrédito y con fuertes tensiones y enfrentamientos sociales en relación a la masiva inmigración que algunos permitieron establecerse en España sin tener en cuenta nada más que su propio ego (soy el líder mundial de la soliradidad) y ahora pasa lo que pasa. Láse lo que que está pasando en Almería, que no es sino el prólogo de lo que pasará en el resto de España.
Gracias ZP. Gracias titiriteros. Gracias progresía. Gracias ONGetas.