El organismo regulador de las telecomunicaciones en EEUU está preocupado por el aumento del ruido de fondo que se ha venido produciendo en todas las bandas de frecuencias en los últimos 20 años. La proliferación de dispositivos inalámbricos como los teléfonos móviles y el WiFi, supuestamente ha aumentado el número de fuentes de interferencias que introducen ruido fuera de las frecuencias en las que operan, aunque la FCC se muestra desconcertada puesto que todavia no tiene evidencia de que esta sea la única razón.
En un aviso público lanzado la semana pasada, invita a cualquiera que pueda aportar nuevos datos a responder a la consúlta pública que ha abierto por esta causa.