acaba de recibir la licencia y negocia con amena, telefónica y vodafone para iniciar el negocio
La compañía vasca podría salir de su mercado tradicional y ofrecer un servicio global con actividad en todo el mundo
c. etxeberri/p. simancas
Donostia. La compañía de telecomunicaciones Euskaltel está realizando gestiones para tratar de convertirse en el primer operador virtual de móviles (OMV) del Estado, según ha podido saber este periódico. La empresa vasca acaba de obtener la correspondiente licencia de operador virtual por parte de la Comisión Nacional del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) y con ella estaría capacitada para romper las fronteras de su mercado tradicional -Euskadi-, y transformarse en un operador global con actividad en todo el mundo.
Los operadores virtuales de telefonía móvil son aquéllos que no cuentan con frecuencia radioeléctrica, ni red propia ni antenas pero llegan a acuerdos con las empresas que disponen de infraestructuras para alquilárselas. Euskaltel tiene red para teléfonos móviles en la CAV pero no dispone de ella en el resto del Estado, no porque no pueda invertir en nuevas instalaciones sino porque el denominado espectro celular (espacio reservado a las frecuencias de radio para teléfonos móviles) es muy reducido y actualmente está controlado por tres compañías: Telefónica, Vodafone y Amena. La compañía que preside el ex lehendakari José Antonio Ardanza se encuentra negociando con las tres, según reconocieron a este periódico fuentes de la compañía.
Gracias a un convenio en exclusiva con Amena que expira en 2007, Euskaltel ofrece servicio de telefonía móvil desde el año 1998 en el resto del Estado, aunque Amena ha visto modificado recientemente su accionariado, lo que supuso que France Telecom -que opera internacionalmente en el mercado de los móviles con la marca Orange- se hiciera con el 97,9% del accionariado, en el que también se encuentra todavía Caixa Catalunya, con el 2,1% restante.
Cuando France Telecom compró la empresa española por 1.600 millones de euros a mediados del pasado año, los responsables de Euskaltel garantizaron que se mantendrían los acuerdos con Amena en el futuro y reconocieron que habían transmitido a los directivos del grupo francés «una invitación para participar en nuestro accionariado». Posteriormente, los directivos de la multinacional francesa admitieron que estudiaban entrar en el accionariado de Euskaltel con un eventual acuerdo que se limitaría al negocio de móviles de tercera generación.
A pesar de estas declaraciones de intenciones, Euskaltel no quiere esperar a que termine el convenio con Amena y está moviendo fichas para continuar ofreciendo servicios de telefonía móvil en el resto del Estado y abrirse a mercados internacionales con la licencia recién obtenida. Y es que, de no llegar a un acuerdo con ningún operador, se podría dar la circunstancia de que la empresa vasca se encontrara el año que viene sin medios para ofrecer su servicio de telefonía móvil. Actualmente negocia con Amena una posible continuidad del convenio, lo que no quitaría para que en un futuro llegase a un acuerdo con otro de los operadores dominantes.
trece aspirantes La CMT ha concedido hasta ahora la licencia de operador virtual móvil a otras doce compañías, aparte de Euskaltel. Entre estas empresas se encuentran nombres como Jazztel, Tele2, British Telecom, Carrefour, Telecor (perteneciente a El Corte Inglés) y Ya.com. Más de cien firmas han solicitado a la Comisión el permiso para operar en este negocio y disponen ya de una licencia provisional para dar servicios de reventa de móvil.
Por todo ello, Euskaltel tendrá que darse prisa para ser el primero en conseguir un acuerdo con las tres operadoras que poseen las infraestructuras en el Estado. De hecho, Tele2, El Corte Inglés y Carrefour también aspiran a convertirse en las primeras compañías que ofrecen servicio virtual para móviles.
Euskaltel parte con ventaja en esta carrera, ya que, como recuerdan fuentes de la compañía, lleva años ofreciendo servicio de telefonía móvil, algo que no hace ninguno de los demás aspirantes. Además, la compañía vasca tiene en la actualidad cerca de medio millón de terminales de móviles activos, lo que significa un buen aval a la hora de negociar con los principales operadores. Una vez que las empresas aspirantes consigan acceder al mercado, lo podrán hacer en dos modalidades: compitiendo ellas solas contra el resto de operadores virtuales y las tres dominantes, o por medio de alianzas con una de estas últimas. No sería de extrañar que Euskaltel optara por la última de estas opciones, tal y como ha venido haciendo con Amena durante casi diez años.
Abaratamiento La conversión de Euskaltel en OMV le permitirá comprar los excedentes de tiempo de telefonía que poseen las operadoras establecidas, a través de sus redes. Ello lo podrá hacer no sólo para sus propios clientes y para los nuevos que capte, sino que también tendrá capacidad para vender esos excedentes de tiempo a otras operadoras del mundo, de modo que Euskaltel tendría la posibilidad de aplicar una reducción de precios finales. Además, Euskaltel alquilaría parte de las instalaciones y antenas de Telefónica, Vodafone o Amena a cambio de un precio pactado. Así, el cliente también podría verse beneficiado con tarifas más baratas, ya que la estructura de costes de la operadora vasca sería más económica. Algo parecido sucede con las entidades bancarias virtuales que existen en Internet que, al no verse obligadas a afrontar gastos de infraestructuras físicas, pueden ofrecer comisiones más reducidas, entre otras ventajas.
denuncia El hecho de que hasta ahora las tres grandes compañías que dominan el mercado no hayan querido alquilar sus infraestructuras ha provocado el rechazo de los pequeños operadores. La empresa Opera interpuso una denuncia a principios del pasado mes ante la CMT, que ha abierto una investigación sobre posibles abusos. Opera acusa a Telefónica Movistar, Vodafone y Amena de impedir el acceso al mercado de la telefonía móvil y discriminar a las empresas que no les interesan para formar alianzas. La Comisión iniciará este mes la investigación sobre esta situación, aunque recientemente el órgano estatal regulador del sector ya dejó caer que, para que bajen los precios de las comunicaciones por móvil, es necesario que entren en el mercado los OMV.
Y es que la situación que se produce en el Estado es atípica. En el resto de la Unión Europea existe alrededor de un centenar de operadores virtuales de móvil, mientras que en España no hay ni uno, a pesar de que una orden ministerial regula desde 2002 este tipo de prestadores de servicio.
Las tres compañías principales argumentan que sólo estudiarán las ofertas de empresas que realmente aporten valor añadido al negocio y no las que se limiten a ser meros revendedores de minutos y "parasitar" su red sin realizar inversiones.
Irrupción de XFERA A los tres operadores que dominan el mercado se les sumará próximamente el consorcio Xfera que, en el año 2000 (cuando la empresa pertenecía en su mayor parte a la compañía francesa Vivendi; a la constructora de Florentino Pérez, ACS; y a la empresas de servicios de las hermanas Koplowitz, FCC), obtuvo una de las concesiones de telefonía móvil de tercera generación (UMTS). Sin embargo, hasta ahora Xfera no ha realizado las inversiones necesarias e, incluso, ha vivido dificultades económicas. El grupo de telecomunicaciones sueco TeliaSonera se hizo a principios de este verano con la mayoría de las acciones de este cuarto operador y su intención es ofrecer en diciembre servicios de telefonía móvil.
Fuente: noticias de gipuzkoa