Ya van dos veces que me pegan un toque (de un par de segundos) desde el número 902022853, imagino que la gracia estará en tener que devolverles la llamada para ver de qué se trata y así cobrarte la tarificación especial. En teoría con fijarse en el prefijo debería bastar para no acabar picando.
Un problema aparte está para los que como yo se nos olvida bloquear el teclado, que tras el toque ese número queda el primero en la lista de llamadas y si lo llevas en el bolsillo a la mínima que te sientes puedes estar devolviendola sin darte cuenta.
Es una vergüenza que se permitan cosas como ésta.