¿Por qué el español se odia tanto a sí mismo?
Pues porque siguen las rencillas y los odios, porque no se perdonan a sí mismos, porque pretenden con otro tipo de ruido, acallar estrepitosamente, lo que permanece en su memoria y mientras no hagan una renovación de información y corrijan ese distorsionado pensamiento, sus actos continuarán siendo manipulados por su subconsciente, el “programa” que tienen metido en su cerebro, no hace más que darles los resultados de la programación incrustada en su cerebro, siguen arrastrando los mismos errores, porque la “GUARRA CIVIL” es un programa erróneo y defectuoso que sigue contaminando al país y a sus habitantes.
No me explico por qué los psicólogos españoles y todas esas personas que, se supone, estudian para “ayudar” a la población, mentalmente hablando, no han tomado cartas en este asunto tan importante y necesario para la salud mental de los habitantes de este país.
Los políticos, no son las personas adecuadas para dirigir un país, porque ellos mismos están contaminados de odios y rencillas por los asesinatos y la muerte de sus familiares y algunos, sólo buscan el poder para enriquecerse y otros para vengarse, así que no son los más adecuados para “gobernarlo”, visto está el desajuste que existe en todas las instituciones gubernamentales, desde el sistema judicial (que debería de ser el mas serio, coherente, sensato y prudente), hasta una simple página web, del sistema informático, se corrompe, por la trayectoria incorrecta de este, supuesto, “sistema democrático”.
¿De qué le sirve a la población española tanto “erudito”? ¿De qué le sirve a la población española tanto “sabio-ndo”? Todos parecen saber mucho, haber estudiado mucho, haber viajado mucho, conocer muchas culturas, muchos idiomas, etc. ¿Y QUÉ? ¿Para qué sirve todo eso, si la sociedad está enferma y no se hace nada por ella? ¿Para qué queremos una “jaula de oro” si a los pajarillos no se les alimenta? La población española es “feliz” con el fútbol, las carreras de coches, de motos, el botellón, y su “tractor amarillo” (por el que siguen pagando canon y regalías) y el coche y la casa que les robó la hipoteca del banco, ¡cuánta felicidad!
¿Por qué mucha gente nacida en esta tierra se siente frustrada y prácticamente desterrada de lo que es suyo y le pertenece legítimamente? ¿Por qué mucha gente odia a la tierra que lo vio nacer? ¿Por qué continúan algunos españoles pretendiendo dividirse en vez de unirse?
¿No pueden ser capaces de olvidar lo desagradable de la historia y empezar de nuevo?
Si no nos desprogramamos y tiramos a la basura, todos esos programas defectuosos e inservibles que manipulan nuestra mente, no seremos capaces de avanzar hacia un mundo correcto, donde los niños, que son el futuro del mundo, puedan salir, libremente de su casa, a jugar al aire libre, sin sentirse perseguidos ni acosados por personas enfermas de odio.