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Agentes de la Policía Nacional de Talavera (Toledo) han procedido a la detención de un ciudadano extranjero que regentaba un locutorio donde se comerciaba con artículos robados, como autor de un presunto delito de receptación.
A raíz de la detención de una persona por un robo con fuerza en interior de vehículo, cuyos objetos sustraídos fueron posteriormente vendidos en un locutorio de la ciudad, se inició una investigación sobre este local, con el fin de determinar si podría tratarse de un hecho puntual o si, por el contrario, en ese establecimiento se estaba comerciando de forma habitual y consciente con efectos que tenían un origen ilícito.
Según ha informado la Delegación del Gobierno en nota de prensa, las múltiples pesquisas y gestiones practicadas, confirmaron las sospechas de los investigadores, que después de obtener suficientes indicios de que en ese locutorio se estaba comerciando con objetos procedentes de robos en parcelas y vehículos, solicitaron la pertinente autorización judicial para llevar a cabo un registro en el interior del local.
Dicho registro arrojó resultados, si cabe, mayores de lo que incluso podía pensarse, interviniéndose numerosos efectos que provenían de hechos delictivos. La persona que regentaba este locutorio, un ciudadano de origen rumano, fue detenido por un presunto delito de receptación.
Por el momento, hay alrededor de 10 robos con fuerza, cuyos perjudicados ya han reconocido como propios efectos que han sido intervenidos en el registro del locutorio, si bien la Policía Nacional aún sigue realizando gestiones para determinar el origen exacto de otros efectos, cuyos legítimos propietarios aún no han sido identificados.
Por ello, desde la Policía Nacional de Talavera se ha informado a los ciudadanos que hayan podido sufrir un robo en el interior de sus parcelas o en vehículos de que en las dependencias del Grupo-I de Policía Judicial se encuentra habilitada una exposición de los efectos que han sido intervenidos para que puedan ser reconocidos.
El detenido está identificado como C. A., varón de nacionalidad rumana, 36 años de edad, sin antecedentes. Entre los efectos intervenidos hay varios subwoofer, radiales, herramientas variadas, diversas joyas, un ordenador portátil, una escopeta y una pistola de aire comprimido, un microscopio, teléfonos móviles y aparatos electrónicos, dos módem, material de fotografía, una lijadora y una caladora.