UNA ENORME TORPEZA Y UN SUSPENSO CLAMOROSO A TODOS AQUELLOS "POLITICOS" SE SE HAN DEDICADO A ESCONDER LA MUY DEFICIENTE LABOR DE UN ATENTADOR CONTRA LA SALUD PUBLICA.
JUNTA CASTILLA LA MANCHA
Yo, Juan José Guerrero Ortiz, soy un Castellano-manchego, nacido en Tobarra (Albacete) y actualmente domiciliado en Nava de Abajo (Pozohondo) de Albacete, (una pequeña pedanía de unos 500 habitantes situada a unos 40 Km. al sur Albacete en la calle Mayor, 39 y con D.N.I. 74.495.785-G.
Es mi deseo dirigirme a usted, con la ilusión de que tenga a bien leer esta queja, si llega a sus manos, pues entiendo que su agenda esta apretadísima y será difícil que lo haga. De todas formas lo haré aunque esta jamás llegue usted a verla, de no intentarlo nunca podré saberlo. Deseo comunicarle antes de nada que ya he puesto en conocimiento a la Gerencia de Atención Primaria de Albacete este asunto. Pues la coordinadora de prestaciones me contestó que desestimaba la reclamación haciéndome saber que quedaba agotada la vía administrativa y que podía establecer demanda en el Juzgado.
Fue una respuesta vergonzosa, que no se ceñía en absoluto a la queja, un verdadero insulto la inteligencia ajena. Una respuesta surrealista. Han podido suceder varias cosas, o no la ha leído, no la ha entendido, no la ha querido entender, no me he explicado con claridad, o no se ha enterado de nada.
¿Qué hago yo ahora que tengo que desplazarme fuera de Nava de Abajo para ir al actual médico de familia? Mi familia no dispone de coche, depende de mí, y yo debo de atender mi trabajo. Nadie quiere mojarse en este tema. Yo y toda mi familia hemos perdido toda la confianza en este Sr. Con lo cual no puede ser mi medico jamás.
¿Qué debo hacer y cuales son mis derechos?
Voy a depositar en usted toda mi confianza con la esperanza de que pueda ayudarme, pues el estado de indefensión en el que me encuentro, y la abrumadora desilusión por parte de las instituciones que supuestamente me representan y que pensaba que iba si la ha ser escuchado, he quedado totalmente defraudado por ellas, pues han ignorado descaradamente mi problema. Y por ello es por lo que he decidido a dirigirme a usted.
Todo lo ocurrido sucedió en el Consultorio de Nava de Abajo que depende del Centro de Salud de Alcadozo (Albacete). Pues me gustaría denunciar públicamente o poner una reclamación o queja contra el facultativo del consultorio de Nava de Abajo (Pozohondo) Don Pedro Juan Lozano Simarro num. de colegiado 02019216. Una denuncia en el Juzgado, ya la he desestimado ya que no poseo medios económicos para costearme abogados, procuradores etc. (Como en la mayoría de los casos ha sido y a día de hoy todavía ocurre, lamentablemente, el que mas poder y medios económicos posee, siempre lleva las de ganar, en detrimento siempre del mas débil). Yo trabajo de Celador en el Hospital de Hellín y mi sueldo no me permite poner en marcha esta denuncia en el Juzgado contra el Sr. Doctor. Pero sí deseo alzar mi voz y pregonar donde sea preciso y enérgicamente, a toda la persona que esté interesada en que no se produzcan hechos similares. Por todo esto pensé que seria muy oportuno ponerlo en conocimiento del DE USTEDES, dadas las graves y diversas negligencias y atentado contra mi salud de este facultativo.
Con la ilusión de que esta carta llegue a sus manos, seria para mi un honor que la leyera, que seguramente le será difícil entender por su gravedad. Afortunadamente son muy escasos los tristes y desagradables hechos ocurridos.
Muy Sres. míos:
Juro que lo que voy a relatar a continuación es totalmente cierto, "la pura, firme y contundente verdad", acreditada con documentos, informes médicos que confirman estar en posesión de la razón, y si fuera necesario testigos.
El día 9 de marzo de 2010 estando en casa realizando unos trabajos, en el último peldaño de una escalera, esta se rompió y caí al suelo en plancha de unos dos metros de altura aproximadamente.
Me llevaron al servio de Urgencias del Hospital de Hellín donde además trabajo como Celador en ese Hospital y en ese mismo servicio. Tras realizarme diversas pruebas me entregaron un informe medico en el que entre otras cosas se hacía constancia de que tenia derrame articular en codo derecho con dolor al mover el brazo, dolor de espalda contusión el las costillas, en la cara y en las rodillas etc. Afortunadamente nada roto "de milagro".
Cuando vengo al medico de cabecera D. Pedro Juan Lozano Simarro y le entrego el informe de urgencias del Hospital de Hellín, sin preguntarme nada y sin levantar la cabeza del ordenador, se limitó a tramitarme un parte de baja con fecha del día 9 de marzo de 2010 en el que ponía que la duración probable de la baja seria de cuatro días. Quede totalmente asombrado y anonadado ante la cualidades de vidente que poseía el medico. ¿Cómo podía saber que en cuatro días estaría recuperado sin mirarme?
Me entrego el parte de baja y me dijo que eso eran solo cuatro días, que no tenía nada roto y que volviera a los cuatro días. Yo estaba poli contusionado y me dolía todo,
Vuelvo a los cuatro días y entonces se digno a mirarme el brazo, y me dijo que no tenia derrame articular (era el único que hacia esa declaración) Y fue entonces cuando me pregunto que era lo que me había ocurrido. Consulta brevísima y me entrego el primer parte de confirmación. Esto ocurrió el día 12 de marzo de 2010. Como el siguiente día para recoger el siguiente parte era festivo 19 de marzo de 2010, me cito para el lunes 22 de marzo.
Ese mismo día mirándome el brazo solamente que todavía lo tenia morado del derrame, pero no el resto de lesiones, doliéndome todavía la espalda, pues tengo una hernia discal en L5 y tras la enorme contusión, lógicamente me dolía. El medico me dijo que yo estaba ya recuperado y que podía ir a trabajar. Yo asombrado ante esa decisión de comente que me dolían muchísimo las costillas la espalda y el brazo derecho, además del dolor no podía moverlo, ni hacer esfuerzos con él. El medico entonces me dijo me fuera a urgencias y me valoraran de nuevo. Inmediatamente me hizo un volante medico dirigido a Urgencias del Hospital para una nueva valoración. No entiendo porque elaboró este documento, cuando esta comprobadísimo que hacia caso omiso a todos y cada uno de los informes médicos de los facultativos de Urgencias y especialistas traumatólogos.
Ese mismo día al salir de la consulta tienen que llevarme a urgencias de nuevo. Un familiar tuvo que llevarme porque no podía conducir por el dolor del brazo. Llegué a urgencias a las 14:32. Me estuvieron mirando el brazo y llamaron a la traumatóloga de guardia. Esta me dijo que hacia dos semanas que me había caído y que era totalmente lógico que me doliera, que tuviera paciencia e hiciera una serie de ejercicios. Elaboraron otro informe para que se lo entregara a mi medico de cabecera. Como salí de Urgencias ya muy tarde y el medico del consultorio se había ido. Entonces lleve el informe al día siguiente al medico.(23 de marzo de 2010.)
Este señor mira el informe de urgencias y me dice que estaba totalmente recuperado y que me podía ir a trabajar. Yo le conteste que no podía trabajar porque me dolía el brazo a cualquier movimiento. Haciendo caso omiso a mis palabras y al informe medico que le presenté y sin decir nada mas, emitió el parte de alta y me lo entrego. Yo le dije que no podía ir a trabajar, pero que si estaba empeñado en darme el alta medica, volvería de nuevo a Urgencias del Hospital.
Un poco enfadados con la actitud de este medico D. Pedro Juan Lozano Simarro y ante la prepotencia que creerse único, dueño y señor y seguro de estar en posesión de toda razón y la verdad absoluta "un todopoderoso" Una doctora de urgencias, asombradísima por verme de nuevo allí me llamo para observar de nuevo mi brazo y emitir un nuevo informe contundente, decisivo y concluyente para que se lo diera a este medico de familia. Con letra mayúscula, le daba el siguiente comunicado: BAJA, CON REPOSO ARTICULAR Y MOVILIZACION PROGRESIVA, HASTA RESOLUCION DEL PROCESO REABSORCION DEL HEMATOMA Y ALTA POR PARTE DE REHABILITACION. Estaba clarísimo que daban a entender este señor que dejara de entorpecer la labor que realizaban los doctores de urgencias. Que el seguimiento de mis dolencias lo llevarían directamente en el hospital y era allí donde tenían que decidir cuando estaba en condiciones de desarrollar mi trabajo.
Ese mismo día volví a la consulta del medico de cabecera que todavía no se había marchado y le entregue el informe medico que he mencionado.
Lo leyó, y con unos aires de superioridad y un claro gesto de prepotencia insoportable, un silencio humillante y con indiferencia, sin importarle nada mi situación me devolvió el informe y me dijo que dirigiera a Albacete y lo entregara en la inspección médica. Claramente este señor estaba atentando gravemente contra mi salud y poniendo en grave peligro mi vida y la de los demas usuarios de la carretera. Pues en ese momento no tenía quien me llevara y no tuve mas remedio que ir conduciendo hasta Albacete, (con un brazo solo) porque este señor así lo decidió.
Además, al darme de alta no tenia mas remedio que irme a trabajar obligado por el medico de familia y lesionado, no importándole lo más mínimo estado de mi salud.
Tome el informe y me fui a la inspección de Albacete. Como anteriormente he dicho conduciendo con muchísima dificultad porque no podía manejar mi brazo derecho.
Allí rellene un formulario - reclamación para que me dieran de nuevo la baja por no poder trabajar. Volvía a mi casa y al día siguiente miércoles DIA 24 de marzo de 2010 me fui a trabajar con el brazo vendado y en cabestrillo como me lo dijeron el día anterior en el Servicio de Urgencias Del hospital de Hellín al que de paso deseo y quiero felicitar a todo el personal que trabaja allí por el buen comportamiento profesionalidad y eficiencia con la que fui atendido.
Pues yo entiendo que cuando una persona necesita ayuda, se le debe apoyar y no pisotear y ponerle trabas haciéndole la vida difícil y mucho menos ponerla en serio peligro.
Todos mis compañeros. Médicos, enfermeras y compañeros celadores, departamento personal y de gestión y mi propio Jefe de Celadores, no daban crédito a lo que estaban presenciando.
Asombradísimos preguntaban el porque estaba allí. Conteste que el medico de cabecera me había dado el alta porque según él estaba apto para trabajar en una puerta de urgencias. "Esto es de juzgado de guardia". Si este señor necesitara alguna vez un servicio de urgencias debería encontrarse en la puerta a un Celador tan capacitado física como anímicamente para ayudarle como lo estaba yo ese día.
Como fui forzado a ir a trabajar y lo repetiré hasta la saciedad (atentando claramente y gravemente contra mi salud) lo puse en conocimiento de mis superiores los cuales entendieron mi situación e intentaron calmarme. Pues estaba muy alterado y con un estado de ansiedad serio. Por parte del departamento de Personal se comunicaron con la inspección medica de Albacete e intentar agilizar y aclarar aquella situación tan extraña y al fin y me citaron para el día 25 de marzo de 2010.
Me atendió una inspectora medica, la cual tenia todos los informes médicos que he ido mencionando, observó el brazo y me dijo que fuera a mi medico de familia para que me tramitara la baja.
Nunca me he alegrado tanto de haberme cambiado me medico de familia el día de antes. Es decir este señor que se llama Pedro Juan Lozano Simarro, ha dejado de ser mi medico, por suerte para mi.
Mi Doctor actual me elaboro el parte de baja en espera de un informe medico del servicio de traumatología del hospital de Hellín en el que se valore si puedo trabajar o seguir con la rehabilitación. Dicho informe también tengo que mandarlo a la inspección médica de Albacete.
En definitiva, yo jamás podré entender, ni nadie de mi entorno con los que he hablado y contado el caso, que puedan existir en el siglo que estamos, personas de estas características. Y lo más insólito, extraño y asombroso es que los tengan en activo practicando la medicina en contra del bienestar del paciente y atentando con la salud de los demás y jugando con la vida de las personas. Afortunadamente están contados y son pocos los facultativos y cada vez más escasos este tipo de personas que carecen totalmente de moral.
Esperando que esta carta no se eche en el olvido o se guarde en el fondo de algún cajón, pues solo me mueve la búsqueda del bien de todos y que no vuelvan a ocurrirles a otros pacientes hechos tan lamentables como los relatados, pido que se tomen las medidas oportunas contra el Sr. Simarro, procediendo como se merece la gravedad de este asunto y se acepte esta queja contra él por los hechos señalados que creo merecedores de sanción.
Deseo señalar que dicha queja la he enviado también al Presiente del Gobierno de España, al Presidente del Congreso de los Diputados, a la anterior Ministra de Sanidad, que hizo caso omiso a mi queja, al Defensor del Pueblo de España y al de Castilla la Mancha ,que dicho sea de paso ha sido el único en molestarse para intentar ayudarme pero sin éxito, pues el Gerente de atención primaria de Albacete se dedica a echar balones fuera. Tambien la ha recibido la Gerencia de atención primaria de Albacete, la Consejería del SESCAM, El gerente del SESCAM de Castilla la Mancha, un largo etc… también ha sido publicado en diversos medios de comunicación a los que agradezco su colaboración para que toda la sociedad sepa de cómo funcionan las cosas en Nava de Abajo, a la vez que lo hare extensivo en todas las redes sociales.
Espero que este actual gobierno tenga un poco mas de sensibilidad que estoy seguro de ello.
Reciba un afectuoso saludo:
Atentamente
JUAN JOSE GUERRERO ORTIZ
Nava de Abajo a 15 de septiembre de 2012