La fusión de Orange y MásMóvil entra en una nueva fase tras la Declaración de Objeciones publicada por la Comisión Europea1, un trámite donde expresa sus preocupaciones tras un análisis de la operación. La CE concluye que la fusión tendrá efectos anticompetitivos que podrían dar lugar a subidas de precio.
Como resultado de esta investigación en profundidad, a la Comisión le preocupa que la operación propuesta pueda reducir el número de operadores de redes en España, eliminando así una importante presión competitiva y un rival innovador en los mercados minoristas españoles de servicios de telecomunicaciones móviles, servicios de internet fijo y paquetes de servicio múltiples (incluidos los servicios convergentes de telecomunicaciones fijas y móviles). A la Comisión le preocupa que ello pueda dar lugar a grandes subidas de precios para los clientes minoristas afectados en todo el mercado español. Los efectos anticompetitivos previstos son sustanciales, incluso teniendo en cuenta los posibles ahorros de costes, en un contexto en el que la competencia ha sido un motor de inversión y calidad de los servicios en el mercado español.
Por su parte, tanto MásMóvil como Orange recuerdan que esta declaración es un paso dentro del procedimiento estándar ya previsto que no prejuzga el resultado de la operación y que les da la oportunidad para responder a las preocupaciones de la Comisión.
Seguimos confiando en el resultado del proceso y vamos a seguir trabajando para transmitir a la Comisión Europea los beneficios de la operación para los consumidores y empresas, tanto en términos de aumento de opciones para los clientes en servicios innovadores, como en el incremento y aceleración de las inversiones en 5G y fibra en España en un contexto de reducción de inversiones en los últimos años y el resultante retraso en el despliegue de 5G respecto a la agenda digital de la Unión Europea.