Las costumbres y la tecnología no lo permite aún.
Técnicamente las batería no permiten acumular la energía necesaria comparable con las capacidades de los motores convencionales. Ya sea porque las baterías serían carísimas, y las velocidades de carga muy lentas , aunque se progresa en todo ello.
Hoy hay automóviles muy respetables por sus soluciones intermedias como son el:
- Toyota Prius 2010, con consumo de gasolina de 3.9l/100km, que tiene un motor eléctrico y uno de explosión, en realidad lo que consigue el eléctrico es recuperar en la desaceleraciones algo de energía y ayudar al motor de explosión a tener un buen rendimiento termodinámico.
- Honda Insight 2010, para mí tiene soluciones técnicas muy sencillas y más baratas que los TOYOTA/LEXUS (las soluciones sencillas son una virtud en la ingeniería) aunque consume algo más que el Prius, 4.4l/100km.
Otra solución inteesante es el Chevrolet Volt (en Europa OPEL Ampera) que se diferencia de los anteriores en que el motor de explosión no propulsa el coche, lo que hace es cargar la batería sin necesidad de conectarse a la red, el motor eléctrico es siempre el que propulsa el coche.
El Volt/Ampera en realidad debe de recargarse en la red eléctrica que es para lo que se ha diseñado, sólo utiliza el motor de gasolina en los casos que necesite recargar la batería y no tener problemas de autonomía. Es un paso intermedio, digamos que viaja con su generador eléctrico. En el futuro en esos modelos podría ser prescindible y abaratas los costes.
El problema es que proporcionalemnte siguen siendo más caros que los demás.
Más realista y rentable hoy mismo serían estos proyectos como este del primer autobús urbano híbrido que es español (elmundo.es) (en realidad ha habido otros fuera de España), autobuses que en tráfico real consumirían la mitad de los actuales, e incluso menos.
Para los autobuses urbanos (e interurbanos provinciales, unos 200km de recorrido por viaje) tanto autobuses eléctricos como híbridos, a día de hoy son viables. Pueden cambiar las baterías en las bases en pocos minutos, sería como repostar.
Hay por ahí proyectos próximos y realistas, pero aún caros como el Peugeot 308 Hybride (o su hermano Citroën C4 Hybride) parecido a los anteriores pero el motor eléctrico lo combina con uno diesel.
En el fondo no sólo es un problema tecnológico, es un problema de:
- Mentalidad del consumidor.
- Menores prestaciones.
- Infraestructuras de carga eléctrica y formas de vida (en casas unifamliares, sí se podría hacer, en España no se vive así).
- Intereses industriales, quedarían fuera muchísimas industrias tradicionales, y hay muchos intereses.
- Muchísimos intereses también en la industria suministradora de combustible y sus redes.
- Etc.
Saludos.