El coche eléctrico, limpio pero no rentable: 350.000 Km, para que sea rentable... Allí es nada.
Año nuevo, vida menos contaminante. El vehículo eléctrico es ya una realidad en España. Todos los grandes fabricantes de automóviles esperan lanzar al mercado sus modelos eléctricos. El primero en llegar al mercado de particulares es el Mitsubishi i-Miev, a la venta por 29.153 euros, que con la subvención de 5.800 euros del Plan Movele del Ministerio de Industria se quedan en 23.323 euros.
El i-Miev es un vehículo completamente eléctrico que no emite CO2 que se alimenta por unas baterías de ion litio cuya autonomía es de 150 kilómetros como máximo, siempre que no se circule a un nivel alto de revoluciones, ni de rendimiento alto del motor. Si esto ocurriera, la autonomía perdería unos 20 kilómetros al gastarse antes la batería.
Las primeras dudas que asaltan a un posible comprador de un vehículo eléctrico es cómo se comporta un vehículo o si se conduce igual que uno de combustión; dónde lo puede recargar, y si le resulta rentable.
La primera pregunta es fácil de responder. El i-Miev, hermanastro del Peugeot iOn y del Citroën C-Zero, se comporta exactamente igual que un coche automático de combustión. Ofrece 60 caballos de potencia y se conduce de igual forma que cualquiera de sus rivales como pueden ser el Fiat 500, Nissan Pixo, Ford Ka, o el Citroën C1, el Peugeot 107 y el Toyota Aygo. Misma maniobrabilidad y facilidad de conducción. A favor del vehículo eléctrico tenemos un aspecto fundamental, la entrega de potencia. Si en los coches de combustión es más progresiva y necesitamos llegar a un determinado número de revoluciones, en el eléctrico, contamos con la mayor cota de potencia desde la primera revolución del motor. Si pisamos con garbo, el i-Miev sale muy rápido. Claro que nos tenemos que acostumbrar, tanto peatones como conductores, a la ausencia de ruido del motor. Es completamente silencioso.
La segunda pregunta se convierte, en la actualidad, en un escollo. Si bien el i-Miev está pensado para el uso por ciudad dado que es un vehículo de cuatro plazas y de 3,47 metros de longitud y que su autonomía es de 150 kilómetros, el cliente de una gran ciudad lo podrá adquirir, el de una pequeña, dependerá de su radio de acción. ¿Por qué? Por la escasez de puntos de recarga. En las grandes ciudades españolas ya existen gasolineras con punto de recarga eléctrica, e incluso algunos parkings públicos cuentan con postes de recarga. Sin embargo, a las ciudades o pueblos más pequeños, estos postes aún no han llegado. Aquí dependemos del enchufe de nuestro garaje.
El i-Miev se recarga en seis horas con un enchufe normal de los que existen en cualquier casa si la batería está totalmente descargada. Mitsubishi ha dotado a su i-Miev con una salida de enchufe trifásico (de alto voltaje) que puede cargar la batería en un 80% en menos de media hora. El problema es que la disponibilidad de este tipo de enchufes en los hogares particulares es mínima.
Por último, la tercera pregunta es la que, con la coyuntura económica actual, complica la elección de un coche eléctrico como compra rentable para un particular. Las propias firmas automovilísticas lo saben y por eso enfocan este tipo de vehículos hacia el segmento de flotas de empresas y administraciones públicas.
Comparemos el Mitsubishi i-Miev con un vehículo de combustión de sus mismas características. Hemos elegido el Nissan Pixo (es el mismo modelo que el Suzuki Alto). Tanto el i-Miev como el Pixo ofrecen 68 caballos de potencia y un habitáculo y dimensiones parecidas.
Mitsubishi ofrece en España el i-Miev a 23.323 euros a sus clientes, descontando los 5.800 euros de la subvención del Plan Movele a la compra de vehículos eléctricos. La marca de los tres diamantes afirma que el coste de la recarga de la batería para realizar 150 kilómetros es de 2 euros, con la tarifa eléctrica actual.
El Nissan Pixo.
Nissan ofrece el Pixo Acenta a 8.600 euros y homologa un gasto de combustible de 4,4 litros por cada cien kilómetros.
Por lo tanto, el i-Miev necesita 1,3 euros de gasto de luz por cada cien kilómetros, mientras que el Pixo se necesita 5,54 euros de gasolina de 95 octanos (tomando como precio del litro de gasolina el último publicado por Industria de 1,26 euros/litro). El coste de la recarga eléctrica es cinco veces inferior al del repostaje de combustible, con lo que el i-Miev parece más rentable. Sin embargo, el elevado precio de compra del Mitsubishi le resta rentabilidad.
Para igualar costes entre ambos modelos, necesitamos realizar 350.000 kilómetros, una cifra más que considerable y difícil de alcanzar en la vida de un vehículo si el cliente no es un profesional del transporte.
Es decir, si el i-Miev cuesta 23.323 euros, en 350.000 kilómetros suma un coste de 3.900 euros en recargas de baterías, lo que hace un total de 27.223 euros. Por su parte el Pixo cuesta 8.600 euros y en 350.000 kilómetros, se reposta por valor de 19.390 euros, lo que suma 27.990 euros.Conclusión
El i-Miev es uno de los primeros pasos en el largo camino a medio plazo de la implantación del vehículo eléctrico en nuestras carreteras y ciudades. Esta tecnología es una realidad como así lo atestigua la elección del Nissan Leaf como coche del año.Sin embargo, todavía es un embrión a nivel de cliente particular. Primero faltan postes para la recarga de las baterías, resulta tres veces más caro en comparación con un vehículo igual de combustión, y no se ha logrado un estándar en las baterías, ya que unas marcas alquilan sus baterías mientras que otras las venden incluidas en el precio del vehículo. Por no hablar de la traslación del impuesto que soportan los combustibles a la factura de la luz, ya que ningún Gobierno soportaría la merma de ingresos en sus arcas con la popularización de este tipo de vehículos.
No obstante, es el futuro sobre todo en las ciudades, ya que se reducen las emisiones de CO2 considerablemente y no se pierde un ápice de 'divertimento' en la conducción; sólo el rugido del motor y ese olor característico de la gasolina.
bien: esto coincide con lo que un servidor Y OTROS, alegamos por la web, ELECTRICO SI, sano sanote pal clima, pero un atraco al bolsillo.llama la atencion el nuevo FORD FOCUS electrico, con muy buena pinta, pero !"que la bateria sera "propiedad del cliente", o algo asi, vamos que... esa no va en el kit del coche, supongo que en tiempos de garantias ?, aunque te le venden con ella puesta...350.000 km ? y sin cambiar NI UNA SOLA VEZ la bateria ?, no se lo creen ni ellos, ni su caballo, un poco "ingenuos" estos del expansión.Los coches electricos deben comprarlos los RICOS para sanear las ciudades y el clima, no se hace tanto por dinero, como por ECOLOGISMO carillo...mientras tanto, los mortales esperamos a que sea al menos IGUAL que lo que hay actualmente, sino mejor...