Hola a tod@s.
Posteo esta noticia por que va más allá de lo puramente anecdótico, de hecho cada día cierran tiendas y abren otras nuevas en Sevilla y en el resto de España, pero para mí tiene algo de especial que no siempre las palabras escritas saben expresar adecuadamente.
Hoy he leído en el suplemento local de El Mundo (en su versión escrita, lo siento no puedo aportar ningún enlace de la noticia), que la tienda de música Sevilla Rock hecha el cierre definitivo el 30 de Enero.
Está tienda abrió en 1988, cuando el formato más usual eran aún los discos de vinilo y las cintas de casette. Forma parte aún de la franquicia Madrid Rock que posee varios establecimientos en la capital de España.
Cuando he leído la noticia un sentimiento primero de sorpresa y luego de tristeza me ha invadido, a pesar de que yo sabía que en los dos últimos años las ventas habían descendido un 30%, y su futuro era poco halagüeño. Tristeza no sólo porque sus ocho empleados actuales, aunque llegó a tener doce, se van a la calle sino por la fuerte carga simbólica que el cierre de esa tienda supone.
En esa tienda me compré mi primer disco de vinilo (lo recuerdo, fue el A Momentary Lapse Of Reason de Pink Floyd), mi primer Cd compacto, y las horas y horas que he pasado en esa tienda buscando y rebuscando rarezas de Rock, Soul o Jazz. Hace varios años que no voy por allí, pero recuerdo la amabilidad de sus empleados y el ambiente un tanto freaky-rockero-alternativo que lo imbuía todo, por contraste al más comercial y hortera que el mega coloso comercial El Corte Inglés, situado al lado, ofrecía en su tienda de discos.
Oficialmente, la tienda cierra por el impacto del top-manta y las descargas, legales o "ilegales", en Internet. Esto puede formar parte del despliegue mediático de 'engaño masivo' que la SGAE y otros organismos supuestamente defensores de la propiedad intelectual, perpetran y filtran por todas partes en todo medio de comunicación a su alcance. El Mundo, que yo no compro pero leo ;-) , es uno de esos medios afines a este tipo de organizaciones mafiosas.
Lo cierto es que sea cual sea la razón (y dejé de comprar CDs originales cuando en esta tienda subieron a 3000 antiguas pesetas el precio de los mismos por unidad), no siento más que perplejidad por lo rápido que cambia nuestro mundo y lo traumático que resulta adaptarse/nos a él. Seguro que en vuestras ciudades y pueblos también se dan casos como éstos y nos estaría mal que lo contaréis, pero echaré de menos aquellos llamativas bolsas naranjas con el anagrama de Sevilla Rock, que causaban la inmediata atención de los colegas: ¡quillooooo, ya te has comprao otro disco en Sevilla Rock? :-D
Perdonad por el tocho, pero las tardes de Sábado son, a veces demasiado aburridas.
Un saludo. 8-)