Una compleja red formada por más de 50 locutorios de la capital y de los municipios de la periferia se había convertido en una tapadera para montar una red de blanqueo de capitales, procedente del narcotráfico. Los agentes del Grupo VII de la Policía Judicial desarticularon el lunes esta organización al detener a 28 personas a las que imputan el haber evadido más de 100 millones de euros, según explicaron ayer los responsables de investigación.
La policía sitúa al frente de la organización al dominicano Jorge Luis Pujol, de 35 años, apodado El Terrible, que junto con su compañera montó un complejo entramado a través de la sociedad mercantil La Real de Envíos. La empresa, creada en 2009, estaba domiciliada en la calle de Bravo Murillo. La red se había ido expandiendo por la zona de Cuatro Caminos y seguidamente a Majadahonda y Alcobendas a través de la compra de nuevos locutorios.
Los agentes sospecharon que algunos inmigrantes pudieran hacer envíos frecuentes de altas cantidades de dinero a sus países de origen (sobre todo, a Colombia y la República Dominicana), cuando no tenían un trabajo acreditado.