Desde principios de año noto que mi conexión a Vodafone va un poco rara, y después de hacer varias pruebas de velocidad, me doy cuenta que la velocidad de subida no sobrepasa de los 2 megas. Dejo pasar unos cuantos días a ver si es un problema puntual, pero al no arreglarse llamo el día 7 para poner una incidencia y se presenta el día 9 en mi domicilio un técnico de Vodafone. Tras revisar la instalación me confirma que en mi domicilio no hay ningún problema y que efectivamente, hay un problema con la velocidad de subida. Revisa el tap del edificio y me dice que el no puede hacer nada más, que tiene que pasar la incidencia al equipo de redes y que si en 48 horas no me lo solucionan vuelva a llamar a Vodafone.
Pasadas esas 48 horas no solo la incidencia no estaba arreglada, sino que me la habían cerrado como “solucionada”. Por lo menos aún tenía conexión a internet y se podía navegar de manera regular. Me vuelven a abrir otra incidencia y que me envían un técnico a casa. Les insisto que ya estuvo un técnico en casa y que ya había pasado este tema a redes, que no era problema de mi domicilio y de mi instalación. Aun así, vuelve a pasar un segundo técnico, que después de estar hora y media en casa, me cambia el router (mi router anterior ya me lo habían cambiado hace 2 meses) y llega a la misma conclusión: el problema no es en mi domicilio, y que lo vuelve a escalar al departamento de redes.
A todas estas y ya pareciendo que se cachondean de mí, recibo una llamada de un comercial para ofrecerme suculentos descuentos de mi factura de Vodafone si solicito una tarjeta Visa Vodafone.
Hasta ese día tenía algo de conexión a internet, pero al día siguiente el router se queda sin red (también me quedo sin fijo), iluso de mí, pensé que ya estaban con el problema, pero tras pasar 24 horas, vuelvo a llamar a atención al cliente, que me deriva a soporte técnico. Quien me atiende allí realiza el protocolo que tienen predeterminado: resetear el router, me pide que resetee a los valores de fábrica, etc. Al terminar todo eso, me dice que enviará un técnico a mi casa.
No podía salir de mi asombro, le digo y le insisto que ya han estado DOS técnicos en casa y los dos han dicho que el problema no es en mi instalación, que es fuera, y que supuestamente habían escalado el problema a redes. ¿Qué ha hecho redes desde la visita del primer técnico?, le pregunté y no me supo contestar. ¿Es que no tienen un histórico de todo lo que se le hace a un cliente, de sus averías, visitas a su domicilio, etc? Me dice que el problema puede ser el router, “Pero si me lo han cambiado hace unos días” le digo y me responde que el que tenía antes era DOCSIS 3.0 y este nuevo es 3.1 y que puede estar ahí el problema.
A pesar de todo esto, se presenta un TERCER técnico este viernes, que poco podía hacer, salvo decirme que era un problema de señal y que no podía hacer nada, salvo… adivinad… PASARLO AL DEPARTAMENTO DE REDES.
Ya cabreado (diez días con la avería y casi 1 semana sin internet), vuelvo a llamar a Vodafone, a ver si se podría acelerar de alguna manera. Le explico todo lo anterior y asombrada me dice como es que han ido TRES técnicos a casa, cuando desde la primera visita ya se sabía que era un problema del exterior de mi casa. Por fin alguien con algo de sentido común en Vodafone.
Hoy sábado se pone en contacto conmigo alguien del departamento de redes (¡Aleluya!), pero mi gozo en un pozo, después de explicarle todo otra vez, me dice que tiene que concertar una cita conjunta del departamento de redes junto con los técnicos en mi domicilio para arreglarlo. Le vuelvo a repetir que el problema NO ES EN MI DOMICILIO, pero dice que tienen que hacer comprobaciones y que si el próximo martes estaré en casa. ¿El martes? ¿Después de todo lo que me había pasado y tengo que esperar cuatro días más?
Me comenta que el departamento de redes no trabaja los fines de semana y que él es solo el que está de guardia. Que va a llamar a un superior para consultar si se puede adelantar al lunes. Al rato me vuelve a llamar y me dice que no es posible, que me tengo que esperar al martes.
Pasadas unas horas me llaman de atención al cliente por la avería, le vuelvo a relatar toda la historia y me dice que no puede hacer nada, sino dejar constancia de mi cabreo para que reclame en mi próxima factura.
Y así estamos, va a llegar el martes, después de 15 días de la primera avería y 10 días sin internet sin saber si lo van a solucionar.