Soy una víctima más del acoso desmedido de los comerciales de Jazztel que prácticamente en 3 a 4 días de la semana y desde lugares diferentes llaman sistemáticamente, a veces lo han hecho hasta las once de la noche para ofrecer su servicio.
Creo que en lugar de poner un teléfono para que uno llame y vuelva a dejar datos que uno no quiere dar, alguien d ela compañía se ocupe de que no se importune el mismo número telefónico con tanta asiduidad, pero eso parece ser una tarea perdida ya que he progabo por las buenas y por las otras y hasta he recibido insultos por parte de algún operado con acento argentino que no aceptó que me negara a atenderle.
Parece que la ignorancia de Jazztel no percibe que de esa forma JAMÁS voy a optar por sus servicios, lo que probablemente otros tampoco harán por la misma razón, ya que no creo que a nadie le haga ninguna gracia que lo estén importunando desde números de teléfono inexistentes u ocultos durante casi todos los días de la semana.
Me gusta eso del decreto tanto y cuanto que prohibe este tipo de prácticas, pero como toda legislación en ESpaña está para decorar el BOE y no para aplicarla, a menos que sea para perjudicar a algún poble diablo o alguien que se exceda en la velocidad de la carretera y esto último sólo si eres anónimo ya que si eres uno de los que salen en la tele jamás te tocarán un pelo aunque mates a alguien. A las pruebas me remito.