1. Demasiadas distribuciones
Para un usuario novato es difícil tener que escoger entre 5-10 distribuciones de Linux la que más le conviene. Y es que muchas son parecidas entre ellas (p.e. Ubuntu, Linux Mint, Fedora, OpenSuse, Mandriva son similares) pero luego tienen diferencias entre ellos. Por ejemplo, Linux Mint está basado en Ubuntu al 98% pero su filosofía es incluir software propietario popular (por ejemplo algunos códecs) mientras que Ubuntu sólo incluye software libre.
La idea es que cada cual pueda instalarse la distribución que más le convenga teniendo así mayor eficiencia. Pero para alguien que se quiere introducir en Linux, tener que buscar información sobre tantas distribuciones para ver cuál es la que mejor le supone un handicap para pasarse a este sistema operativo. La mayoría de la gente no quiere tener que pensar. Sería más fácil tener un sistema de nombres similar a Windows: Linux Basic, Linux Pro, Linux Business.
2. La temida línea de comandos
Pasan los años y sin duda Linux ha experimentado un gran cambio en este aspecto. Recuerdo una distribución RedHat de hace bastantes años donde casi todo funcionaba a través del terminal: instalaciones, configuraciones, montaje de discos... era una experiencia nefasta para un usuario novato. Por suerte, ahora casi todo se hace a en modo gráfico (almenos en Ubuntu y similares) y resulta mucho más fácil para cualquier usuario. Ahora puedes instalar software, desinstalarlo, configurar tu sistema, personalizarlo... aún más fácilmente que en Windows, es una gozada. Sin embargo, aún no nos podemos olvidar completamente de la línea de comandos. Al instalar algunas librerías sólo puedes hacerlo por línea de comandos, y hay software que tampoco tiene interfaz gráfica para la instalación.
La mayoría de las veces que utilicé la línea de comandos sólo hicieron falta 3-4 comandos para solucionar cualquier problema de compatibilidad, librerías, etc (apt-get hace milagros). Otras veces la instalación entera se hace por comandos (y mejor no hablar si la instalación no se completa correctamente). Para un usuario avanzado, el uso del terminal no supone un problema, incluso puede estar familiarizado, pero un usuario medio hoy en día no está preparado para usar comandos, y tener que hacerlo le supone una mala experiencia.
IMGANGE instalar vmware en linux.png La instalación de vmware se realiza íntegramente por línea de comandos (si la instalación vía Synaptic no funciona)
3. Olvídate de los videojuegos
No se trata de una desventaja técnica, más bien económica: hay poco mercado en Linux en comparación con Windows y no sale a cuenta el desarrollo de versiones Linux de videojuegos. Técnicamente es posible que en Linux funcionen los videojuegos pero en la práctica los títulos más populares sólo salen para Windows. Hay herramientas como Wine para emular un sistema Windows dentro de Linux y poder jugar; pero eso no hace más que evidenciar la necesidad de tener Windows para jugar a videojuegos.
4. Nos olvidamos de virus pero no de otras amenazas
Se habla mucho de que Linux está libre de virus, no se necesitan antivirus ya que es un sistema operativo seguro. El problema es que hoy en día los virus son sólo una parte de las amenazas a las que estamos expuestos: phising, adware, spyware. ingeniería social.... Ni Linux ni ningún software nos puede proteger 100% contra todas las amenazas; y cada día los virus están perdiendo protagonismo a favor de otros métodos de dañar nuestros sistemas. En conclusión, la ventaja de que Linux no tenga virus cada vez pierde fuerza porque igualmente hacen falta otros métodos de protección.
5. Hace falta tiempo y dedicación
Aprender a usar Linux requiere cierto tiempo. Visual y funcionalmente se asemeja bastante a Windows, y por eso la curva de aprendizaje cada vez es menor (ya no es sólo un sistema para expertos). Aún así muchas tareas requieren usar la línea de comandos o conocer un poco más a fondo el funcionamiento de Linux. La mayoría de tareas básicas para un usuario medio se pueden aprender en poco tiempo, pero sin duda lo necesitaremos.
6. Incompatibilidad de software
Linux y sus desarrolladores han hecho un gran trabajo lanzando aplicaciones alternativas a programas de populares de Windows. Gracias a eso tenemos OpenOffice, Thunderbird, Firefox... que podemos ejecutar en Linux y que funcionan tan bien o mejor que su competencia de Windows (Office, Outlook, Internet Explorer). Sin embargo, al cambiar a Linux tenemos que vigilar mucho este aspecto porque muchas aplicaciones de Windows no están disponibles en Linux, o las alternativas que tenemos no tienen todas las funcionalidades. Por ejemplo, Photoshop no tiene ninguna alternativa a su nivel.
7. Podrían aparecer cracks y seriales
Una de las ventajas que comentamos de Linux era que no existían cracks ni seriales. Pero eso es cuando el software es libre y la financiación no es la venta de licencias. Habrá que ver qué pasaría si programas comerciales que funcionan en Windows (que tiene un modelo de negocio de venta de licencias) lanzaran versiones para Linux. Seguramente aparecerían seriales o cracks igual que ocurre en Windows. Siguiendo con los ejemplos, ¿qué pasaría si Photoshop lanzara una versión para Linux? No sería software libre por el monopolio que tiene al no tener prácticamente competencia y vender licencias a un precio muy elevado. Seguirían con su modelo de negocio de venta de licencias y por tanto aparecerían seriales -quizá también cracks- para Photoshop.
Cuando los desarrolladores comerciales que lanzan programas para Windows pasaran a Linux no creo que cambiaran su modelo de negocio sino que intentarían hacer lo mismo en el entorno Linux.
Otra cosa mas, y esto es para los usuarios de linux en Venezuela. Por nada del mundo usen la versión Canaima, está comprobado que es un Spyware, en la cual los servicios de inteligencia del Gobierno "infiltran" por internet a las computadoras de los usuarios que usen este sistema operativo, con el objeto de "espiar" todas las actividades que haces y encontrar supuestas pruebas comprometedoras que mostrase su desacuerdo con el régimen de Darth Chávez y su gobierno "sucio-comunista". No es broma, lo digo en serio porque tengo amigos y conocidos que les fueron "espiados" y tuvieron que desinstalar el Canaima de sus PC, hasta llegaron los extremos de formatear sus Disco Duros e reinstalar y trabajar con puro windows.