
El dueño de la empresa Alechip, tienda de videoconsolas y reparación de teléfonos móviles de Avilés, para quien la empresa Nintendo solicitaba 23 años de prisión por diversos delitos contra la propiedad intelectual e industrial, ha sido absuelto definitivamente por la Audiencia Provincial de Oviedo, que ha desestimado el recurso presentado por la multinacional japonesa contra la sentencia, también absolutoria, del Juzgado Penal de Avilés que señalaba que "los dispositivos intervenidos no iban provistos de software alguno" a pesar de que sí venían las instrucciones para su introducción.
El caso Alechip se remonta al año 2009, cuando la Administración de Aduanas de Avilés retuvo, a petición de la empresa Nintendo, una partida de cartuchos para la consola Nintendo DS importados por Alechip. Dichos cartuchos permiten dotar de memoria interna a la consola, para así poder ejecutar programas diseñados por el propio usuario. Pero para el juzgado, "pueden servir, desde luego, para utilizar juegos no original pero también para convertir la consola en un ordenador personal".
Además, desestimó también en el supuesto delito de la propiedad industrial al argumentar que copiar la forma de la clavija para los cartuchos no es ilícito
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