Telefónica está llevando la fibra óptica hasta los nuevos barrios y urbanizaciones. Una vez allí instala un armario llamado muxfin, que actúa como mini central o nodo remoto desde donde salen los pares de cobre que finalmente llegan al domicilio de los abonados.
El problema que se están encontrando muchos clientes que están bajo la cobertura de los muxfin, es que solo Telefónica puede darles servicio y una vez han contratado con ella no pueden desagregar su linea para pasarla a un operador alternativo. Es una situación cada vez más frecuente en los nuevos barrios y urbanizaciones.
Orange denunció esta hecho ante la CMT. Según el resto de operadoras, los muxfin forman parte de la estrategia de Telefónica para mantener a sus nuevos clientes lejos de las ofertas del resto de las operadoras, ya que en ellos no tiene obligación de hacer sitio para los equipos de los alternativos. Telefónica, en cambio, asegura que no está cortando el acceso a ningún usuario, ya que las nuevas líneas no forman parte de la red tradicional, si no de un nuevo despliegue.
Inicialmente la CMT comunicó su intención de exigir a Telefónica que comparta los armarios, pero con la llegada de la regulación de la fibra hasta el hogar, ha cambiado su postura. Según informa Cinco Días, la CMT considera que los nuevos clientes tienen que tener acceso a ofertas alternativas, pero que el acceso indireccto, o revendido es suficiente para cumplir esta función. De modo que Telefónica debe ofrecer un servicio mayorista a los alternativos y solo las operadoras que se comprometan a instalar sus propios armarios podrán utilizarlo provisionalmente.
