En un movimiento de calado que no tiene precedente en los casi 100 años de historia de la compañía, Telefónica ha empezado a utilizar la red de su competidor Adamo para llegar a zonas donde no tiene cobertura de su propia red de fibra FTTH.
Telefónica, como compañía heredera del antiguo monopolio de la red telefónica fija, siempre se ha mostrado orgullosa de dar servicio teniendo el control absoluto de la red física al ser de su propiedad. Con un despliegue de fibra que actualmente llega a 26,3 millones de hogares, Telefónica nunca ha necesitado recurrir a alquilar la red de un tercero, como sí hacen el resto de operadoras cuando alquilan su red mediante NEBA para cubrir las zonas donde no disponen de despliegue propio.
A pesar de los más de 26 millones de accesos FTTH, la red de fibra todavía está lejos de llegar a todos los rincones donde el cobre ha llegado durante los últimos 100 años. En la zona que la CNMC llama no competitiva, la fibra de Telefónica solo cubre el 60% de la extensión que tiene la red legada de cobre.
En estas zonas no rentables las operadoras financian su despliegue gracias a los sucesivos planes PEBA-NG del Gobierno. En la edición 2020 Movistar se hizo con 11 de los 33 proyectos subvencionados, siendo superada por Adamo con 19 proyectos.
Es en estas áreas situadas principalmente en el medio rural donde a Telefónica no le salen las cuentas, así que la operadora ha adoptado una posición más pragmática. No tiene sentido desplegar red propia en zonas de baja rentabilidad donde ya existe competencia y ésta está subvencionada.
Acuerdo de Telefónica para usar la fibra de Adamo
Por primera vez en la historia de la compañía, Telefónica alquilará la red de otra operadora para dar servicio a los clientes que se han quedado fuera de sus planes de cobertura de fibra propia. Por el momento no se jugará el prestigio de su marca principal Movistar, sino que lo hará a través de su segunda marca O2.
Desde hoy los clientes con cobertura de fibra de su hasta ahora competidor Adamo, pueden acceder a los productos de O2. Su web ya permite contratar las dos tarifas disponibles para la zona no competitiva, siempre que el domicilio del cliente no tenga cobertura de la fibra directa de Movistar pero sí de la de Adamo. Las tarifas disponibles sobre la red de Adamo son el combinado de fibra 600 Mb y móvil con 30 GB por 50 € o la tarifa de solo fibra 300 Mb por 38€.
Aunque todavía no es posible en todas las ubicaciones, hemos podido comprobar que la contratación es viable en zonas como León, Lugo o en Noja (Cantabria). También desde la operadora nos confirman que no se trata de un error, sino que el acuerdo ya es vigente.
La red de Adamo llega a 1,8 millones de hogares a nivel nacional
El acuerdo entre Telefónica y Adamo fue desvelado sin demasiada repercusión el pasado septiembre por un periódico regional de Cantabria, sin aportar otros datos más allá de que el ámbito del acuerdo es nacional. Gracias a él Telefónica tiene acceso a la huella de Adamo, que actualmente llega a 1,8 millones de hogares.
Que Telefónica utilice la red de un tercero tiene implicaciones que habrá que analizar. No sabemos si la operadora ha tirado la toalla de la fibra en estas zonas y, o bien descarta tener su propia red ya que se servirá de las redes existentes, o se esperará a desplegar en el futuro, quizás con acuerdos de coinversión. Lo que sí sabemos es que los clientes tradicionales de Telefónica dejarán de tener servicio mediante el cobre a medida que el cierre de centrales progresa según lo planificado para desmantelarlo totalmente en 2025.