La denominación KEO no es un acrónimo, si no la combinación de las tres letras de más uso entre los idiomas del mundo más extendidos. Durante un periódo de tiempo que finalizará el 31 de diciembre de 2002, todos los habitantes del planeta tenemos la oportunidad de remitir a KEO a través de Internet un mensaje escrito con un máximo de 6000 caracteres (unas cuatro páginas), dirigido a nuestros descendientes dentro de 50.000.
El proyecto consisite en el lanzamiento previsto para finales de 2003 desde suelo francés, de un satélite pasivo (un satélite que no dispone de instrumentación ni aparato alguno), en cuyo interior viajarán cien DVD almacenando todos los mensajes que se reciban hasta la fecha citada (vía e-mail o vía formulario web), sin censura alguna, más un diamante artificial que portará muestras de tierra, agua, aire y sangre humana. El satélite deberá estrellarse contra la superficie terrestre al cabo de 50.000 años, y su órbita ha sido calculada teniendo en cuenta múltiples factores para que esto ocurra así. Cuando entre en la atmósfera, la cobertura del aparato se ionizará fuertemente, y producirá una aurora boreal artificial con la que se pretende llamar la atención sobre el suceso.
La idea nació en 1994, y es original del francés Jean-Marc Philippe. Años más tarde, ha conseguido la suficiente participación de la industria como para poder hacerla realidad, y no solo eso: además es un proyecto apoyado por la Agencia Espacial Europea, y está clasificado como Proyecto para el siglo XXI por la UNESCO, organización que ha sido capaz de ponerlo en marcha como iniciativa sin ánimo de lucro (el envío de mensajes es completamente gratuito). El coste se estima en unos 50 millones de dólares.
El principal motivo del creador de la idea es hacer reflexionar a una gran cantidad de gente sobre nuestro futuro y nuestras expectativas; ya que, obviamente, resulta difícil asegurar lo que ocurrirá con las civilizaciones dentro de cincuentamil años, no resulta realista poner esperanzas sobre su trascendencia como legado.
Cuando el satélite haya sido lanzado, los mensajes enviados se colgarán en internet para que puedan ser leidos por todo el mundo, sin identificar a sus autores.
La filosofía que encierra todo el proyecto apunta a que la redacción y envío de ese e-mail sea algo que no nos deje "fríos". Internet, por supuesto, será el medio que permita una participación lo más universal posible. ¿Qué se podría decir, qué diríais en él?
Enlace al sitio oficial en versión castellana: KEO.ORG.
Un saludo,
~piezas.