Se confirman las negociaciones con MásOrange para la compra de más espectro 5G que permitirá a Movistar crear una red 5G destinada a empresas y enlaces de Internet Radio 5G.
La creación de MásOrange, fruto de la fusión de MásMóvil y Orange, supone la aparición de un gigante que desde el primer momento se convierte en la operadora de telecomunicaciones más importante del país por número de clientes. Para atenuar el impacto de su llegada en la competencia, Bruselas le obligó a desprenderse de un total de 60 MHz de sus frecuencias móviles, que serán aprovechados por Digi para germinar su nueva red móvil independiente. Aún así, todavía quedan otros 30 MHz en la banda más importante del 5G, la n78 situada en 3,6 GHz, que deberán ser devueltos al Estado o vendidos a un competidor. Esto es así debido a que la ley limita la concentración de frecuencias que puede tener una sola empresa. Tras transferir 20 MHz a Digi y deshacerse de otros 30 MHz, MásOrange se quedará 140 MHz, que es el límite legal en esta banda.
Devolver estas frecuencias al estado está descartado, puesto que MásOrange no obtendría ningún ingreso a cambio y volverían a salir a subasta, acabando en manos de un competidor. Lo más lógico es venderlas a una de las operadoras tradicionales, obteniendo así ingresos y evitando ponerlo fácil a nuevos entrantes.
Movistar es la operadora mejor posicionada para añadir a su portfolio de frecuencias estos 30 MHz adicionales, con los que pasaría a tener 130 MHz en la banda n78. Esta posibilidad era un rumor y ahora parece confirmarse en la información que publica el diario Expansión1, que asegura que las negociaciones entre las dos partes ya están en marcha.
El reloj corre en contra de MásOrange, puesto que la ley fija un plazo de 6 meses para que la nueva empresa regularice su situación si excede los límites de frecuencias, lo que significa que la transferencia debería completarse antes de septiembre.
En la última subasta de frecuencias en esta banda, en la que se dividieron los 20 MHz usados por los viejos radares de Defensa en dos partes iguales asignadas a Orange y Movistar, se fijó un precio de 21 millones de euros por cada bloque, lo que si se toma este dato como referencia fijaría una valoración de 63 millones para los 30 MHz que le sobran a MásOrange.
Para qué quiere Movistar 30 MHz más
Aunque Movistar ya posee 100 MHz en esta banda, que es el tamaño máximo de portadora que soporta el 5G, el excedente de MHz podría servirle a la operadora para atender a sectores especializados, como los clientes domésticos que utilizan enlaces FWA mediante Internet Radio 5G, con los que mediante la red móvil 5G se da internet fijo con prestaciones próximas a la fibra en aquellos hogares que se han quedado sin cobertura de la red fija.
Al utilizar su propia fracción del espectro de forma exclusiva se evita que el uso intensivo afecte el servicio de los clientes de la red móvil, al tratarse de dos redes paralelas independientes, concepto que en 5G se conoce como slice. Otras posibles aplicaciones de estos slices es la creación de redes de alto rendimiento con calidad garantizada destinadas a empresas que requieren un determinado caudal siempre disponible.
De esta forma cobra más sentido la inversión que Telefónica viene haciendo en antenas activas n78 y que ha situado su despliegue en el doble tamaño por número de emplazamientos con 4.000 antenas, que su competidor más inmediato.