Movistar ha ido expandiendo la protección DRM a las emisiones de los canales de su plataforma de TV, eliminado así uno de sus principales atractivos para los usuarios más avanzados: la posibilidad de reproducir los canales desde VLC o Kodi sin necesidad de decodificador.
En enero de 2019 Nagra anuncio un acuerdo1 con Telefónica para proveerle su plataforma de gestión de derechos digitales (DRM) y sistema de acceso condicional (CAS) con el que se cifra la señal de TV y se controla el acceso de los clientes solo a los paquetes contratados.
Desde entonces Movistar ha estado realizando pruebas cifrando algunos canales, aunque la mayoría permanecían abiertos. Esto no representa un problema de piratería para la operadora puesto que para reproducirlos es necesario tener contratado un paquete de Movistar+ y acceder desde la línea del cliente. Esta versatilidad ha permitido que además del decodificador que facilita la operadora o la app oficial, puedan reproducirse los canales accediendo a su URL desde un reproductor como VLC. Incluso han aparecido herramientas muy elaboradas como IPTViewer que añade una amigable interfaz con el listado actualizado de canales y la guía de programación.
Esta posibilidad era especialmente apreciada por los espectadores de eventos deportivos como el fútbol, ya que VLC ofrecía el menor retraso posible en la reproducción, algo indispensable si no quieres enterarte de los goles por los gritos de tus vecinos varios segundos antes de verlos. También hacía la vida más fácil a los usuarios sin decodificador que tienen que usar la app de Movistar+ en dispositivos, cuya valoración es realmente baja y sus reseñas son mayormente negativas2 debido a su mal funcionamiento.
Con la adopción masiva del DRM la TV de Movistar solo mantendrá en abierto los canales TDT. El resto estarán cifrados y será necesario visualizarlos desde el decodificador o la app oficial. El objetivo final es que los usuarios no puedan grabar fuera del decodificador o redifundir la señal fuera del domicilio.
