Un estudio de la firma IHS afirma que los smartphones serán lo más común dentro de sólo cuatro años. En 2015 se venderán 1.030 millones de terminales inteligentes, suponiendo más del 50% de las ventas de móviles en todo el mundo.
Desde hace unos años venimos viendo cómo cada vez hay más teléfonos avanzados en el mercado. El iPhone, los muchísimos modelos con Android, las BlackBerry e incluso los Windows Phone no son nada raro de ver a estas alturas.
Además, aunque los lanzamientos que más llaman la atención son los modelos más potentes y grandes de las marcas como la propia Apple, HTC, Samsung o LG entre otras, la gran parte del mercado se mueve lejos de los Galaxy S II, Desire HD y terminales similares cuyo coste supera con creces los 400 euros.
La clave serán los smartphones asequibles y los mercados emergentes
Los smartphones de gama baja son los que más se venden con diferencia. Además de ser carne de subvenciones de operadoras que los regalan a cambio de una permanencia, el precio de estos modelos libres no es abusivo: por menos de 200€ se pueden encontrar opciones muy interesantes para iniciarse en este tipo de teléfonos, o para aquellos que no necesiten procesadores de doble núcleo o 1 GB de RAM en su bolsillo.
Las previsiones auguran que sólo durante este 2011 se venderán un total de 478 millones de teléfonos avanzados, lo que supondrá el 32,5% del total del mercado de teléfonos móviles en el mundo.
Pero, siempre según los datos de los analistas IHS, esta cifra se verá incrementada un 115% en tan sólo cuatro años, ya que en 2015 serán ya 1.030 millones de smartphones los que se venderán sólo en esos doce meses.
Será entonces cuando estos dispositivos se hagan con la mayor parte del mercado de la telefonía, ya que el 54,4% de los móviles serán de este tipo. Comparando, en 2009 sólo suponían el 15,8% de las ventas.
Uno de los factores importantes será la comercialización de smartphones asequibles en mercados emergentes como China, India o América del Sur.
Esto supondrá un reto que las operadoras tendrán que saber lidiar, ya que el tráfico de datos en las redes móviles se disparará hasta niveles muy superiores a los actuales. Según Cisco, en 2015 cada mes las antenas de telefonía móvil soportarán 1,6 ExaBytes de tráfico (1.600 millones de GigaBytes), 25 veces más que en 2010.
Está claro que siempre habrá hueco para necesidades básicas de comunicación. No serán pocos aquellos que sigan optando por terminales que sólo sirvan para llamar y mensajería SMS, aunque todo apunta a que dentro de unos años éstos serán minoría.
