El spam telefónico y las visitas domiciliarias de comerciales está prohibido desde el día 1 de este mes, pero aún así las llamadas con publicidad de las operadoras continúan. Ante la avalancha de quejas, Jazztel pide colaboración para identificar a los agentes comerciales que se saltan las normas.
En página oficial de Jazztel en Facebook pueden leerse numerosos mensajes de protesta de personas molestas con la publicidad telefónica de la operadora. Incluso se ha formado un grupo de afectados que ya cuenta con 400 miembros. La operadora pide disculpas en un mensaje y pone a disposición un email para facilitar los datos que permitan identificar a los comerciales.
El spam telefónico, prohibido desde el día 1 de marzo
La Ley 29/2009 por la que se modifica el régimen legal de la competencia desleal y de la publicidad para la mejora de la protección de los consumidores y usuarios, fue publicada el 31 de diciembre de 2009 y daba un plazo de dos meses para que las empresas aplicarán la normativa. Desde el día 1 de marzo, su contenido es de obligado cumplimiento para las operadoras y para las empresas que distribuyen sus productos.
En concreto, la ley obliga a que se identifique el remitente, quedando prohibidas las llamadas comerciales con número oculto. Además, el operador "deberá permitir al consumidor dejar constancia de su oposición a seguir recibiendo propuestas comerciales". Los comerciales que realizan visitas domiciliarias, deberán respetar la petición de un inquilino si este no quiere que se le moleste en su casa.
Malas prácticas
El funcionamiento de estas empresas consiste en obtener un listado de teléfonos y sus titulares a partir de los listados telefónicos públicos. Mediante un software marcador, se establecen decenas de llamadas simultáneamente que son asignadas a cada operador , a medida que los destinatarios descuelgan el teléfono.
La mayoría de las llamadas se realizan a primera hora de la tarde o a la hora de cenar en España, para encontrar en casa al máximo número de usuarios. Gracias a la VoIP, el coste de estas llamadas es prácticamente nulo para la empresa, que suele estar ubicada en el extranjero, principalmente en sudamérica.
Son distribuidores que trabajan a comisión y reciben una cantidad por cada alta realizada. En su afán por captar el mayor número de clientes, en ocasiones recurren al engaño, haciendo creer que representan a Telefónica, o incluso a la CMT. En los casos menos graves, prometen fibra óptica, ADSL "digital" o una velocidad imposible.
La pregunta es ¿quién es el responsable? ¿la empresa distribuidora o la operadora a la que representa?
