Los expertos del Incibe aclaran cómo deben protegerse legalmente de un mal uso de su conexión los propietarios que alquilan su apartamento o una habitación y comparten el wifi con los huéspedes.
El wifi es un servicio básico que normalmente viene incluído al alquilar una habitación a través de la popular plataforma AirBnb. Esto no supone un sobrecoste para el anfitrión, ya que si tiene contratada una conexión de fibra en casa solo tiene que compartir el nombre de la red y la contraseña con los huéspedes. En algunos routers incluso es posible crear una red wifi para invitados con credenciales distintas a la principal, limitando así el ancho de banda que puede utilizar y aislando la red para que los dispositivos que se conecten no tengan acceso a los de la red principal.
Abrir la red de esta forma tiene algunas implicaciones legales, puesto que la actividad que realice el huesped en internet deja como rastro la IP de nuestra conexión. Descargar contenido protegido por derechos de autor, pornografía infantil, acceder a servidores que distribuyen fútbol pirata, participar en ataques de denegación de servicio o cometer fraude son solo algunas de las actividades que pueden traer problemas cuando un tercero usa nuestra línea de fibra. En caso de que la operadora reciba un requerimiento de las autoridades en el curso de una investigación, sus registros apuntarán al titular del contrato, que será el que tenga que dar explicaciones.
Preocupado por este riesgo, un usuario que alquila de forma regular una habitación en su casa a través de una plataforma de alquiler turístico, se puso en contacto con la Línea de Ayuda de Ciberseguridad del Instituto Nacional de Seguridad (Incibe) para preguntar si al compartir el wifi de su casa con los huéspedes se está exponiendo a alguna sanción de Protección de Datos o puede caer sobre él la responsabilidad legal como dueño de la conexión en caso de que un huésped la utilice de forma indebida.
Esta línea de atención del Incibe se presta a través del teléfono gratuito 017, mediante un formulario en la web, WhatsApp o Telegram, y las consultas son atendidas por "un equipo multidisciplinar de expertos […] que ofrecen asesoramiento técnico, psicosocial y legal", por lo que su posición a esta cuestión es relevante, al tratarse de un organismo oficial. Siendo la consulta una situación común, el Incibe publica su respuesta en la web1 para que otros usuarios en la misma situación puedan consultarla.
Cómo protegerse legalmente del mal uso del wifi por parte de un huésped
Para el Incibe, protegerse legalmente de un mal uso de nuestra conexión por parte de un invitado requiere una batería de medidas que de entrada se escapan de los medios que un usuario particular tiene a su alcance. Sus instrucciones son:
- Instalar un "portal cautivo" que obligue al huésped al conectarse al wifi por primera vez a aceptar un "disclaimer de responsabilidad" y a aceptar el tratamiento de sus datos personales.
- El portal deberá informar del tratamiento que se hace de los datos conforme al RGPD (Reglamento General de Protección de Datos), detallando la identidad y datos de contacto del responsable.
- Deberá tener unas condiciones de uso que deberán ser aceptadas.
- Finalmente habrá que "tener control de todos los viajeros que se alojan en su domicilio".
Mediante la implementación de esta medida, los accesos de los usuarios quedarán registrados y, en caso de que se realice cualquier acto ilícito, se podrá identificar el dispositivo y la persona que lo realizó, eximiendo al titular de la conexión de los delitos cometidos por éstos.